Al adquirir determinado producto durante las ventas especiales, por rebajas o baratillos, los consumidores deben tener en cuenta las siguientes recomendaciones ofrecidas por la Comisión de Libre Competencia y Asuntos del Consumidor (CLICAC).
Verificar que la calidad del producto o artículo, sea igual a la que mantenía antes de las rebajas.
Debido a que el etiquetado es la única referencia sobre la calidad, evite adquirir productos sin etiquetas o que no proporcionen información clara, veraz y suficiente.
Comprobar, en la medida de lo posible, que el precio del artículo ofertado sea realmente inferior al anterior a las rebajas.
Todos los artículos deben estar marcados con su precio real en el momento de la venta. No es correcta la publicidad de descuentos, como determinado tanto por ciento en los artículos, si la rebaja no queda reflejada en el precio original o anterior.
No aceptar condiciones, como la necesidad de comprar un artículo no ofertado, para obtener rebaja en otro.
Exigir la debida garantía, y que esa información conste por escrito así como la manera de hacerla efectiva.
Recordar que los establecimientos que acepten normalmente tarjetas de créditos, deben aceptarlas también durante las rebajas.
Exigir siempre la factura, comprobante o tiquete de caja.
Y sobre todo, antes de comprar, reflexionar sobre la necesidad real que se tiene del producto.
Además, en toda venta al crédito, es importante leer los contratos antes de firmarlos, para enterarse de las cláusulas.