Tras varios días de permanecer en la clandestinidad, el sindicalista Saúl Méndez reapareció ayer en las instalaciones del �rgano Judicial, junto a sus abogados Rafael Rodríguez y Antonio Vargas hijo.
Méndez se notificó ante el Juzgado Octavo Penal, de la medida cautelar país por cárcel.
El miembro del SUNTRACS responsabilizó al Gobierno de cualquier atentado contra su persona y familiares.
La jueza octava penal, Ileana Turner, reiteró, mediante una providencia, la medida cautelar emitida el jueves pasado a favor de Saúl Méndez, precisó Antonio Vargas hijo.
"Esperamos que ni la Policía Nacional ni la Policía Técnica Judicial se hagan eco de declaraciones formuladas" por el secretario general del Ministerio Público, Rigoberto González Montenegro, quien dejaba entrever que estaba en pie una orden de arresto contra Méndez impartida por el fiscal Auxiliar, Luis A. Martínez, indicó el letrado.
El fiscal de la causa alegaba que existían suficientes méritos para arrestar a Méndez, a raíz de una declaración de Frederic Mayrie Barcasnegras, quien reveló que el dirigente sindical le entregó un arma y B/.500 para que efectuara disparos durante la manifestación que recientemente realizó FRENADESO hasta la Presidencia de la República.
Según Saúl Méndez, han utilizado al Ministerio Público para que investigue un delito que no existe.