El fútbol y el atletismo de Panamá fueron descuidados en las décadas de los 60, 70, 80 y 90. El INDE de otrora ni los miraba. No tenía monitores, entrenadores, árbitros ni nada de eso. Eran los niños feos del país y eso, créalo o no, hizo que hoy día tengamos una pobre herencia. Mientras en Costa Rica tratan el fútbol con amor, acá se trataba con patadas; mientras en Jamaica potencializan su biotipo atlético, acá no tenemos técnicos de atletismo.
Esto no se soluciona en diez años. Fue un déficit tremendo de cuarenta años. Es increíble que el deporte más popular del mundo y cuya práctica es muy económica no tenga más de 10 monitores nombrados en Pandeportes. Urge, señor Rubén Cárdenas, aumentar este número, no porque a mí me dé la gana, o porque usted sea del fútbol. No se deje llevar por eso. Es simplemente porque el fútbol es el deporte más practicado en muchos sitios de este país.
Igual el atletismo, que carece de personal idóneo en Panamá. Tocará traer gente de afuera que enseñe y capacite.
Principalmente en la capital los jóvenes corren y juegan fútbol. No pido que les quite a otros deportes, que no se entienda eso, comprendo que se le dé al boxeo y el béisbol, los otros dos grandes pilares del país y a todos los demás, karate, lucha, etc.
Pero por cantidad de población, clubes, ligas y demás, estos dos deportes deben convertirse en pilar. Ya se dio un gran avance en el quinquenio anterior con instalaciones para fútbol y atletismo. Ahora toca tener más personal que enseñe. Necesitamos más gente como Florencio Aguilar y como Vladimir Bertiaga.