Más de 200 presos fueron trasladados a la nueva cárcel de Changuinola, ayer, jueves.
Un total de 263 detenidos fueron trasladados a la prisión ubicada cerca a la comunidad Débora, en el corregimiento de Guabito, provincia de Bocas del Toro.
La jornada fue encabezada por Donadio Guglioti, director general de penitenciaría, quien calificó a la antigua instalación que por más de 30 años funcionó en el centro de Changuinola, como una de las cárceles más duras del país, y con condiciones infrahumanas para los reos.
En buses y auto patrullas fueron llevados los presos que como despedida quemaron plásticos, cartones y otros retazos que usaban como colchones improvisados, como sábanas y toldas; muchos tenían que dormir en la cancha de baloncesto.
Las nuevas instalaciones tienen camarotes, sanitarios, baños, cámaras de seguridad en cada pasillo y departamento, habitaciones de visitas conyugales, cancha de juego, terrenos para cultivos, entre otras comodidades. En el nuevo lugar se cuenta con espacio para 300 detenidos.