La administradora del Parque Omar, Mingthoy Giro, rindió ayer declaración ante la Fiscalía Segunda Anticorrupción, en torno al escándalo de la desaparición de las 36 toneladas de las esculturas de los "Juegos de Antaño" y dijo estar dispuesta a someterse al detector de mentiras.
La también directora de Eventos Especiales del Despacho de la Primera Dama, dijo estar sorprendida de la forma como desapareció un monumento de tal magnitud de los dos depósitos ubicados dentro del parque, donde permanecían desde el 21 de agosto del 2006, cuando llegaron en un contenedor que les envió Patrimonio Histórico.
Dos años después, por coincidencia en agosto, una funcionaria reportó la desaparición, por lo que el SPI presentó la denuncia ante la DIJ el 2 de septiembre pasado.
Mingthoy indicó que en el parque de 55 hectáreas no sólo laboran los empleados administrativos y funcionarios de mantenimiento, sino también los agentes del SPI y que diariamente entra mucha gente al centro recreativo, así como gran cantidad de personas que viven en los edificios contiguos al parque.
Sin embargo, reconoció que los únicos que tenían acceso a las llaves de ambos depósitos era el personal autorizado y funcionarios de mantenimiento del parque, "por lo que reiteró que le resulta sorprendente que estas piezas de tal magnitud hayan sido hurtadas y que nadie sepa nada".