Algunos pensarán que hablar del consumo exagerado en estos días es inútil.
Desde noviembre y sobre todo en diciembre, en el mundo aparecen los adornos de Navidad. El ambiente se llena de juguetes, regalos, música para la época, etc.
Conozco panameños que se pasan el año ahorrando, para luego gastar toda la plata en uno o dos días. Caen en una especie de "locura consumista", que a veces causará problemas económicos.
No estamos en contra de las celebraciones patrióticas, ni mucho menos las navidades y fin de año.
Pero hay que advertir, aunque digan que caen en "saco roto", que cada quien debe gastar lo que puede. No es recomendable endeudarse más allá de su capacidad.
Recuerde que luego vendrán las deudas y limitaciones económicas.
Eso de pasarse meses pagando el derroche de fin de año, no tiene justificación.
Aunque usted sea una persona adinerada, comprar cosas innecesarias no es una actitud adecuada.
Y la tercera parte de los panameños que oficialmente son pobres, no tienen ningún motivo para el consumo exagerado de diciembre.
Después de todo, sin querer "aguar" las celebraciones, tener más juguetes, comida y regalos, no significa que usted será feliz.
Siempre recuerdo las caritas contentas de niños que disfrutaban un caballo de palo, hecho con una escoba y un trapeador viejo.
Mientras allá a lo lejos, chiquillos llenos de costosos aparatos se confundían y no sabían cómo disfrutar de ellos.
Otros tenían que buscar jarabes y patillas, para poder hacer la digestión de los variados y numerosos alimentos consumidos en un frenesí que afecta a salud.
Hay que comprar con inteligencia. Se debe comer y festejar de manera adecuada.
Que estas festividades sean realmente para darnos felicidad y no dolores de cabeza.
Una vez alguien con un salario bajo, me dijo que cuando se acercaba diciembre temblaba de miedo. Sufrí pensando en los gastos más allá del presupuesto, las deudas que demorarían meses en cancelarse. Y no les extrañe que algunos parientes y conocidos queden molestos con ellos.
Es que en eso de recibir regalos, hay personas que sólo les importa su costo y no la intención con que se da.
Creo que hay que "mentalizarse" para tener una actitud adecuada antes tantas tentaciones de compras y fiestas. Repito, no se trata de no comprar ni festejar, sino de hacerlo de manera que no nos afecte...
