Al bote por conducir ebrio
Solo unos días después de que la policía registrara su casa de Los Ángeles por una denuncia de vandalismo, la policía de Miami detuvo la madrugada de
Solo unos días después de que la policía registrara su casa de Los Ángeles por una denuncia de vandalismo, la policía de Miami detuvo la madrugada de ayer a Justin Bieber cuando conducía bajo los efectos de sustancias compitiendo contra otro auto deportivo a más de 120 kilómetros por hora, el doble de lo permitido en la zona residencial en la que organizaron la carrera. El conductor del otro vehículo, el rapero Khalil Amir Sharieff también fue detenido.
El jefe de Policía de Miami Beach, Ray Martínez, explicó en rueda de prensa que el cantante está acusado de tres cargos: conducir bajo los efectos de sustancias, consumo de marihuana y bebidas alcohólicas (Justin es menor de 21 años, la edad legal para consumir alcohol en EE.UU.) y conducir con un permiso caducado.
Tras pasar varias horas detenido en la comisaría de Miami Beach, donde se le realizaron más pruebas, fue trasladado a la cárcel del condado.
La detención se produjo en torno a las cuatro de la madrugada. Según las pruebas practicadas, el cantante había consumido marihuana y alcohol.
Al parecer, Bieber iba al volante de un Lamborghini amarillo. El otro auto contra el que competía era un Ferrari rojo. La carrera ilegal se produjo en la avenida Tree Pine Drive, una zona céntrica de Miami Beach, mitad comercial y mitad residencial. Al parecer, amigos del cantante cerraron la circulación en una de las calles con otros automóviles para que Justin participara en la carrera.
Después de declarar ante un juez de Miami mediante una videoconferencia desde el centro correccional al que fue llevado después de su detención en Miami Beach, pagó una fianza de 2,500 dólares y quedó en libertad.