El Vidajena
Por: Redacción -
A través de los siglos se han destacado dos personajes que son como los gatos y los perros. Las suegras y las mujeres de sus hijos. Es muy raro que se hayan llevado bien. No ha habido relaciones armónicas entre ellas, ni aquí, ni en Rusia, ni en Libia, ni en México, ni en nuestro Panamá.
Este caso que dio mucho de qué hablar en el patio limoso de la vieja casa de inquilinato tiene como protagonistas estelares a doña Silvestra, la madre del buaycito Rolando y a Maribella, un paisito de 20 años quien desde los tiempos en que era la mari novia de Roly, como le decían en ese barrio pobre, se ganó la antipatía de Silvestra.
La futura suegra le decía a Régula y a Saco e