Golazo - 24/2/14 - 11:13 PM

‘Cyborg’ va por el trasero de Rousey

T ras despachar en tan solo un minuto y seis segundos a quien supuestamente sería su rival más dura, a Ronda Rousey (9-0-0) y a la

Por: - Lunes 24 de Febrero de 2014 11:13 PM

Eliécer Navarro / Eliécer Navarro

T ras despachar en tan solo un minuto y seis segundos a quien supuestamente sería su rival más dura, a Ronda Rousey (9-0-0) y a la UFC le quedan pocas opciones para elevar su estatus aún más como la mejor peleadora de artes marciales mixtas (MMA) del mundo. Podría pactar una revancha con su oponente del sábado, Sara McMann (7-1-0).

El estadio estalló en abucheos por considerar que el árbitro Herb Dean detuvo el combate demasiado temprano. Entrelazadas contra la malla del octágono, Rousey la derribó con un rodillazo al hígado que la dejó de rodillas, y luego la acabó con una andanada de golpes a la cabeza. A muchos le pareció que McMann aún intentaba defenderse.

También está la opción de enfrentarse a Alexis Davis, quien en la misma cartilla venció con muchas dificultades a Jessica Eye.

Pero lo que todos los “fans” quieren es que se enfrente a la otra gigante del MMA femenino, Cristiane "Cyborg" Santos (12-1-1). Y pareciese que las estrellas se están alineando para eso.

El sábado, después de la pelea, Cyborg tuiteó: "Me alegra que @rondarousey ganó- ahora puedo patearle el trasero en diciembre - que su papi@danawhite haga que suceda".

Para concretarse el combate, primero Cyborg debe bajar a las 135 libras y luego el presidente de UFC, Dana White, tiene que contratarla, ya que actualmente la peleadora brasileña combate en la promoción Invicta.

En declaraciones anteriores, “Cyborg” afirmó que piensa hacer tres peleas en 135 libras, una para ganar el título de Invicta, otra para pelear con Rousey y otra de revancha, porque la primera fue por suerte.

Tanto White como Rousey se mostraron dispuestos a hacer la pelea.

"Si ella hace el peso y se siente saludable, por qué no?", dijo White.

Controversia

El final de la pelea estelar dejó con un mal sabor de boca a muchos expectadores, que abuchearon lo que consideraron una detención apresurada.

"A mí me pareció también que fue muy rápido, pero para eso está un árbitro, para que nadie salga herido", indicó Rousey, quien se mostró abierta a una revancha.

"El golpe conectó y mi cuerpo reaccionó para protegerse, luego escuché su voz (del árbitro) y traté de incorporarme inmediatamente, pero ya era tarde", explicó McMann.

"Odio perder. Tengo que volver y mejorar", agregó.

"Cuando vi cómo pararon la pelea, dije que tenía que ver la repetición", dijo White. "Pero después de la repetición, me pareció que la paró bien".

Paliza

En la coestelar, Daniel Cormier (14-0) hizo lo que tenía que hacer. Apabulló al novato Pat Cummings (4-1) -un reemplazo quien había tomado la pelea con 10 días de anticipación- en solo un minuto y 19 segundos. Durante los últimos días, Cummings se había mofado de Cormier, diciendo que en prácticas lo había hecho llorar.

Primero Cormier lo ablandó con “uppercuts” a corta distancia, bloqueó todos sus intentos de derribos y lo remató con golpes a la cabeza.

"Cuando llega el momento de la pelea, no llevo mis emociones", dijo luego Cormier. "Pat va a tener un futuro brillante en la UFC, pero ahora no era su momento".

Tras la apambinchada que le dieron, la buena noticia para Cummings es que su llegada a la UFC no será efímera.

"Sí, continuará peleando con nosotros", dijo Dana White.

Con su primera victoria en las 205 libras, Cormier se ubica en territorio de Jon "Bones" Jones, campeón de la división y unánimemente considerado el mejor peleador libra por libra en la actualidad.

Pelea de la noche

Rory McDonald (16-2) y un aguerrido Damien Mya (18-6) protagonizaron una emocionante pelea en las 145 libras que vio a ambos intercambiar momentos de dominio, y que acabó con una decisión unánime para el pupilo de Georges St. Pierre. Fue declarada por White como la pelea de la noche.