Krysnar Grandison: Un campeón del diamante
Su equipo representará a Panamá en el campeonato latinoamericano infantil. L a barra gritaba eufórica en las graderías del estadio Andy Alonso, ¿el motivo?, el pequeño
Su equipo representará a Panamá en el campeonato latinoamericano infantil.
L a barra gritaba eufórica en las graderías del estadio Andy Alonso, ¿el motivo?, el pequeño Krysnar Grandison conectaba un batazo de vuelta completa que ayudaba a su equipo, Juan Díaz, a conseguir otra victoria en el torneo sectorial metropolitano infantil de Pequeñas Ligas.
Como ese día, el pequeño Krysnar siempre da lo mejor de él en cada juego para que su novena pueda ganar.
Y es que Krysnar ama el béisbol, lo lleva en su sangre, y además lo practica desde muy niño.
“Mi pasión por el béisbol nació gracias a mis padres, ellos me inculcaron el béisbol, que es un buen deporte, entonces me llevaron a la escuelita de Rodrigo Merón, allí me enseñaron las técnicas y cómo jugar”, dijo Grandison.
Krisnar, de 12 años, ha formado parte de tres selecciones de Metro y además ha representado a Panamá en torneos internacionales en dos ocasiones.
En 2011 formó parte del conjunto preinfantil que jugó en el torneo Panamericano celebrado en Nicaragua, y en 2013 disputó el mundial en China Taipéi.
Actualmente juega para la novena de Juan Díaz, y su meta es llegar al Mundial de Pequeñas Ligas en Williamsport, Pensilvania.
“Para nosotros no hay rival duro, solo hay que jugar la pelota como se debe jugar”, aseguró el pelotero, que ocupa las posiciones de campocorto o segunda base.
Otra de las metas del joven jugador es seguir desarrollando sus habilidades en estas posiciones y en el futuro ser un grandes ligas.
“Quisiera llegar a las Grandes Ligas, aunque sé que primero son mis estudios”, aclaró.
Mientras ese momento llega, Krysnar se inspira en la figura del beisbolista dominicano David Ortiz, quien es su jugador favorito.
“Lo admiro (a Ortiz), porque es un jugador muy bueno y batea mucho, además soy fanático de los Medias Rojas de Boston”, afirmó entre risas el prometedor niño.
Por otro lado, Gilberto Grandison, su padre, está orgulloso del talento de su hijo.
“Él es un buen estudiante y combina su pasión con el estudio. Juega desde los cuatro años. Yo tengo experiencia dirigiendo en categorías menores, tal vez eso influyó en su amor por este deporte”, explicó el señor Grandison.
El sueño de Krysnar (llegar a Williamsport) no está lejos de convertirse en realidad, pues su equipo, Metro A, ganó el Campeonato Nacional de Béisbol Infantil y jugará ahora el torneo latinoamericano.