Mariano se tiró un partidazo de 4 horas y media
La superestrella de los Yanquis llegó puntual, a las 9: 00 a.m., al Justino Salinas, donde le dedicó tiempo de sobra a los
La superestrella de los Yanquis llegó puntual, a las 9:
00 a.m., al Justino Salinas, donde le dedicó tiempo de sobra a los 66 finalistas, a los fanáticos y a la prensa.
Mariano Rivera estaba acostumbrado a trabajar durante un solo episodio para salvar los partidos de los Yanquis de Nueva York en las últimas 17 campañas de su carrera de 19, sin embargo ayer, el panameño rompió esa rutina y se tiró un partidazo de 4 horas y media, en la final del “Pitch, Hit & Run 2014”.
Rivera llegó puntual, a las 9:00 a.m. al Justino “Gato Brujo” Salinas de La Chorrera, donde le dedicó tiempo de sobra a los 66 finalistas de la competencia, a los fanáticos le firmó cientos de artículos, entre esos bolas, gorras y posters, y volvió a contestar una serie de preguntas de la prensa.
A la 1:30 p.m., Mariano se retiró a su natal Puerto Caimito, luego de cumplirle a todos en el estadio, donde se formó antes de fichar con los Yanquis en febrero de 1990.
Euforia total
Acompañado por su esposa Clara, Mariano arribó al coliseo chorrerano en una Toyada Land Cruiser, último modelo, que estacionó en la esquina del jardín izquierdo. Tardó en bajarse del auto, pero unos minutos después el anunciador lo presentó y el Justino Salinas estalló en euforia.
Rivera dio solo unos pasos y de inmediato quedó al frente de cientos de aficionados, quienes desde muy temprano abarrotaron la grada techada frente a la tercera base.
La superestrella de los Yanquis saludó de mano a una gran cantidad de niños y adultos, antes de dirigirse a donde estaban alineados los 66 finalistas de la competencia, en la cual pequeños de 9 a 12 años mostraron sus habilidades a la hora de lanzar, batear y correr.
Llegó la hora del mensaje de apertura del evento y Mariano volvió a ser claro y directo, al pedirle a los pequeños y sus padres a pensar primero en los estudios y luego en el béisbol.
“Aquí todos no van a ser grandes ligas, lastimosamente es así, por eso deben enfocarse en los estudios, ya que eso les quedará para toda la vida”, aseguró Rivera.
A firmar pelotas
Antes del inicio oficial de la competencia, a “Mo” le tocó firmar la 66 pelotas de los finalistas, quienes en ese preciso momento realizaban sus ejercicios de estiramientos en el cuadro interior entre segunda y primera base.
Rivera se tardó una media hora en estamparle con su rúbrica las esféricas y entonces arrancó lo bueno. Los 65 varones y la niña María Magdalena Pimentel, de Darién, se exigieron en la prueba de correr, después batearon y por último lanzaron.
Tras cumplir en esas tres estaciones se contabilizaron los puntajes de los participantes y resultaron ganadores: Juan Arauz, de Bocas del Toro, y Orlando Jaramillo, de Panamá Metro, en la categoría de 11 y 12 años.
Miguel Gómez, de Oeste y José Felipe Torres, de Coclé, fueron los vencedores en la categoría de 9 y 10 años.
Sin embargo, Mariano decidió que no solo iban a ser cuatro los ganadores como estaba estipulado y anunció que la darienita María también viajará a los Estados Unidos, donde verá un partido de las Grandes Ligas.
Los cinco premiados tiene derecho a ir con un acompañante y ‘Mo’ les prometió compartir con sus ex compañeros de los Yanquis en el “club house” del equipo en el Yankee Stadium.