Pese a todo, el Barcelona camina a paso de leyenda
La victoria del FC Barcelona anoche contra la Real Sociedad permite al equipo de Gerardo Tata Martino igualar con seis victorias consecutivas el mejor arranque de Liga del club, que ya habían firmado anteriormente cinco entrenadores.
Barcelona / EFE.
La victoria del FC Barcelona anoche contra la Real Sociedad permite al equipo de Gerardo Tata Martino igualar con seis victorias consecutivas el mejor arranque de Liga del club, que ya habían firmado anteriormente cinco entrenadores.
El triunfo contra la Real por 4-1 ha consolidado al Barcelona en el liderato de la Liga -empatado a puntos con el Atlético de Madrid- y ha permitido al nuevo entrenador igualar los mejores comienzos que técnicos como Johan Cruyff, Louis van Gaal, Josep Guardiola y Tito Vilanova, además de James Bellamy en el ya lejano 1929, consiguieron con el club barcelonista.
El equipo del entrenador argentino ha firmado un comienzo exitoso, ya que después de alzarse con la Supercopa -gracias al valor doble del empate de la ida contra el Atlético de Madrid, 1-1, ya que en el Camp Nou el encuentro acabó con empate a cero goles-, en la Liga continúa invicto desde que se puso en marcha el torneo. A todo ello hay que sumar la victoria en la Liga de Campeones contra el Ajax (4-0).
El triunfo sin paliativos contra la Real (4-1) es hasta ahora la cumbre del Barca de Martino, con unos primeros 45 minutos no vistos en el Camp Nou desde hacía muchos meses, después de algunos partidos anteriores de fútbol contundente pero sin la magia a la que el grupo barcelonista ha acostumbrado a sus aficionados en otras temporadas.
El Barcelona arrancó la Liga con la goleada de la temporada hasta el momento (7-0 al Levante). Le continuaron dos salidas airosas, en las que venció en los campos del Málaga (0-1) y Valencia (2-3), con el resultado como mejor botín, debido a que el fútbol exhibido estuvo muy por debajo de las expectativas, algo parecido a lo que sucedió en la cuarta jornada en el Camp Nou frente al Sevilla (3-2), con una victoria obtenida en el tiempo añadido.
A pesar de la goleada por 0-4 en el campo del Rayo, saltaron algunas alarmas por la pose adoptada por el equipo azulgrana frente a un rival que, después de muchos años, dejó al Barcelona sin dominar una estadística que parecía hecha a su medida: la posesión del balón.
La victoria del FC Barcelona anoche contra la Real Sociedad permite al equipo de Gerardo Tata Martino igualar con seis victorias consecutivas el mejor arranque de Liga del club, que ya habían firmado anteriormente cinco entrenadores.
El triunfo contra la Real por 4-1 ha consolidado al Barcelona en el liderato de la Liga -empatado a puntos con el Atlético de Madrid- y ha permitido al nuevo entrenador igualar los mejores comienzos que técnicos como Johan Cruyff, Louis van Gaal, Josep Guardiola y Tito Vilanova, además de James Bellamy en el ya lejano 1929, consiguieron con el club barcelonista.
El equipo del entrenador argentino ha firmado un comienzo exitoso, ya que después de alzarse con la Supercopa -gracias al valor doble del empate de la ida contra el Atlético de Madrid, 1-1, ya que en el Camp Nou el encuentro acabó con empate a cero goles-, en la Liga continúa invicto desde que se puso en marcha el torneo. A todo ello hay que sumar la victoria en la Liga de Campeones contra el Ajax (4-0).
El triunfo sin paliativos contra la Real (4-1) es hasta ahora la cumbre del Barca de Martino, con unos primeros 45 minutos no vistos en el Camp Nou desde hacía muchos meses, después de algunos partidos anteriores de fútbol contundente pero sin la magia a la que el grupo barcelonista ha acostumbrado a sus aficionados en otras temporadas.
El Barcelona arrancó la Liga con la goleada de la temporada hasta el momento (7-0 al Levante). Le continuaron dos salidas airosas, en las que venció en los campos del Málaga (0-1) y Valencia (2-3), con el resultado como mejor botín, debido a que el fútbol exhibido estuvo muy por debajo de las expectativas, algo parecido a lo que sucedió en la cuarta jornada en el Camp Nou frente al Sevilla (3-2), con una victoria obtenida en el tiempo añadido.
A pesar de la goleada por 0-4 en el campo del Rayo, saltaron algunas alarmas por la pose adoptada por el equipo azulgrana frente a un rival que, después de muchos años, dejó al Barcelona sin dominar una estadística que parecía hecha a su medida: la posesión del balón.