Aumento a docentes pone en aprietos a escuelas privadas
El aumento de $300 al salario base de los docentes del sector público a partir del mes de julio de 2017 generará una situación insostenible para la mayoría de las 850 escuelas y colegios privados del país, advirtió ayer Nivia Rossana Castrellón, de la Unión Nacional de Centros Educativos Particulares.
De acuerdo con Castrellón, ante la realidad de que los salarios en el sector público aumentarán drásticamente, los centros educativos particulares no tendrán la capacidad de equiparar los sueldos a su personal docente sin tener que recurrir a enormes ajustes en matrículas y mensualidades.
Esto, explica, pondrá en grave situación a los colegios particulares cuyos estudiantes son de clase media baja. Quedarán ante la disyuntiva de perder a buena parte de su personal, que buscará mejores salarios en escuelas públicas, o perder estudiantes, pues sus padres no estarán en capacidad de pagar precios más altos y deberán matricularlos en planteles públicos.
"Las escuelas con estudiantes de familias pudientes podrán asumir mejor esta situación, ya que los padres tienen para pagar 100 dólares más, pero la mayoría de las escuelas particulares no están en esa posición", indicó Castrellón.
El aumento de $300 fue asumido este mes por el gobierno de Juan Carlos Varela y la ministra de Educación, Marcela Paredes, luego de una huelga docente que duró una semana. La concesión del aumento se dio sin ningún tipo de condicionamiento basado en evaluaciones de rendimiento de los maestros y profesores.
Según Castrellón, el Gobierno aprobó este aumento sin conocer las graves consecuencias para los colegios particulares. "El decreto que actualmente se está redactando traerá más desigualdad en la educación", dijo Castrellón.
Los aumentos en la mensualidad, según explicó Castrellón, forzarían a las escuelas a aumentos en la mensualidad de un mínimo de $25 si se trata de un plantel pequeño, pero si se trata de colegios grandes, el aumento podrá ser "brutal" para los padres de clase media.
Entre las soluciones que plantean el Consejo Nacional de la Empresa Privada, la Cámara de Comercio y la Unión Nacional de Centros Educativos Particulares para mitigar el efecto que tendrá el decreto está exonerar del pago de impuestos a los colegios particulares de educación laica, lo que los equipararía con las escuelas privadas dirigidas por organizaciones religiosas, las cuales actualmente gozan de ese beneficio.