Institutores retornan a clases bajo estrictas medidas de vigilancia

Redacción
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Los estudiantes del Instituto Nacional retornaron hoy, martes, después de la protesta violenta progagonizada por un grupito de 59 revoltosos.

Personal de seguridad e inspectores del plantel desarrollan una amplia revisión a los estudiantes a su llegada al colegio.  La dirección de la escuela y el Ministerio de Educación han reforzado la medida de seguridad para evitar protestas estudiantiles que terminan en vandalismo y daños a terceros.

Los 59 estudiantes retenidos por la Policía de Menores no podrán ingresar al Instituto Nacional  hasta pasar por un proceso disciplinario.

Algunos padres de familia y propios estudiantes cuestionaron la forma en que la Policía Nacional ingreso al plantel y aseguraron que hubo exceso de fuerza.

Otros acudientes han pedido a las autoridades del plantel que expulse a los estudiantes revoltosos porque conocen quiénes son.

Molinar: No suspenderán clases

La ministra de Educación, Lucy Molinar, advirtió que el Instituto Nacional no suspenderá clases, pero manifestó que los estudiantes deberán responder ante las autoridades por los daños, y, además, el colegio tomará medidas disciplinarias.

Molinar afirmó que todos los estudiantes que fueron detenidos en el colegio están vinculados con los disturbios, y que hay videos, fotos y evidencias que lo corroboran.

Molinar explicó que el comportamiento de los estudiantes, que estaban "reventando el colegio", no se podía controlar con un celador o con un inspector de seguridad, razón por la cual se pidió la intervención de la Policía Nacional.

59 estudiantes retenidos en la protesta de ayer

Unos 59 estudiantes el Instituto Nacional -cinco de ellos mayores de edad- fueron retenidos ayer por la Policía Nacional, tras disturbios en el plantel. Fueron liberados, pero enfrentarán cargos de la Fiscalía de Niñez y del Ministerio de Educación (Meduca) por daños a la propiedad.

El Meduca y la Rectoría del "Nido de Águilas" autorizaron el ingreso de policías al plantel, porque se estaba agrediendo al personal del colegio.

Los alumnos lanzaban piedras contra los que pasaban por el colegio; los manifestantes usaban máscaras, portaban mazos y destruyeron puertas y mobiliario escolar.

La subcomisionada de la Policía de Menores, Erlín Miranda, declaró que a los estudiantes detenidos les hallaron "evidencias" de violencia. Los retenidos fueron trasladados a la sede de la Policía de Menores, donde en horas de la tarde se les otorgó la libertad, luego de que los padres firmaran un documento para comparecer ante la Fiscalía.

Algunos estudiantes expresaron su rechazo al ingreso de los uniformados al plantel educativo, y acusaron a los policías de llevarse a escolares que no tenían nada que ver con las protestas.

La policía lanzó gas pimienta y algunos de los estudiantes fueron tirados al piso.

La defensora del pueblo, Lilia Herrera, visitó la estación de la Policía de Menores, para verificar las condiciones de los estudiantes.