Despertemos, Panamá
No hay peor error en la política como creerse ganador adelantado de las elecciones presidenciales, a solo meses de la fecha magna. Cada lustro pasa lo mismo. Un determinado candidato es tan iluso que incluso hasta se da el lujo de nombrar a sus posibles ministros, directores y relacionistas. Por la avenida México algo similar ocurre, pues el hambre de poder los ha hecho aguantarse 10 años fuera de la papa, pese a las mieles cosechadas en el Pacto de Gobernabilidad.
El Partido Revolucionario Democrático (PRD), fundado en plena dictadura por el general Omar Torrijos, tiene ese karma. En 2009 y 2014, pensaban que volverían al Palacio de las Garzas, pero se quedaron con las ganas. Para no repetir el desastre, han blindado a su candidato presidencial para que no se exponga a la opinión pública. Confiados en que las recientes encuestas los ponen arriba de 40%, se valen del apoyo mediático desde la 12 de Octubre y la Tumba Muerto para generar la sensación triunfalista en el electorado.
Empero, algo interesante está ocurriendo en la oposición. Rómulo Roux y la junta directiva nacional de Cambio Democrático (CD) postularon oficialmente al expresidente Ricardo Martinelli Berrocal como el candidato ideal para la Alcaldía del distrito de Panamá. El clamor popular es tal que incluso la victimización que sufre el otrora mandatario lo ha impulsado y ser favorito para ocupar el cargo de burgomaestre municipal capitalino. Pero hay otra cosa.
Cambio Democrático logra sumar las fuerzas martinellistas, que en su momento disintieron con la dirigencia del partido fundado por “El Loco”. Esto consolida la oferta electoral del que muchos consideran el verdadero movimiento opositor al gobierno nefasto del que vive en El Miramar. Y la realidad es palpable. Con una severa crisis económica y un desempleo que ronda más del 8% en todo el país, la gente anhela el regreso del Cambio. No hay de otra.
La contienda se definirá entre abril y mayo de 2019, cuando el electorado que está conformado por 2.7 millones de personas decidan inclinarse por el Cambio Democrático. Las denominadas fuerzas “independientes”, que en realidad son esbirros de la clase económica acomodada, vinculada al MOTTIN y al varelismo, no han despegado en los sondeos.
Es hora de que el pueblo decida su destino, respaldando al Cambio. Tenemos que despertar a Panamá, del letargo que el ñamenismo ha sumido al país. Larga vida y prosperidad para todos. Saludos, amigos...