Rambulería política
La conducta desplegada por los candidatos Juan Carlos Varea y Juan Carlos Navarro, durante el Foro de Turismo, en el que se enfrascaron en una estéril y burda lucha de puyas y descalificaciones mutuas, demuestra qué es lo que verdaderamente busca la oposición cuando reclamaba a gritos la participación de José Domingo Arias, en estos eventos.
El candidato oficialista advirtió la encerrona a que lo querían llevar los candidatos opositores, y de inmediato reaccionó al decir alto y claro que no caería en los insultos y chistes de sus adversarios, que utilizaron la tribuna, en un claro irrespeto a los organizadores, asistentes y la teleaudiencia, para rambulerías de patio limoso, en vez de exponer sus propuestas sobre la industria turística.
Todo el que vio y escuchó la actividad, se habrá dado cuenta que el candidato del partido en el gobierno mantuvo, la compostura, serenidad y buen ánimo ante los intentos de sus rivales de involucrarlo en la refriega verbal.
A su lado, los dos candidatos opositores intercambiaban diatribas e incurrían en expresiones fuera de orden que no guardaban relación con el propósito del foro empresarial.
La gente quería escuchar qué harían los candidatos para mantener el desarrollo de la industria sin chimenea y no los insultos de políticos que daban la impresión de niños malcriados.