Opinión - 21/2/14 - 12:43 AM

Violencia

A lgunos panameños piensan que cuando se habla de violencia en el país se refieren a asesinatos, robos y narcotráfico. Hay otras formas que tal vez

Por: - Viernes 21 de Febrero de 2014 12:43 AM

Milciades Ortíz / Milciades Ortíz

A lgunos panameños piensan que cuando se habla de violencia en el país se refieren a asesinatos, robos y narcotráfico. Hay otras formas que tal vez no impacten tanto. Nos referimos a la violencia doméstica que afecta a las parejas y menores. Las autoridades informaron que casi 21,000 denuncias recibieron el año pasado. Unas 3,000 afectaban a menores y la mayoría a mujeres, aunque sabemos que hay varones que denuncian sufrirla. (¿?)

Lamentable es que ni 2,000 de esos casos fueron a audiencia. Muchas veces los afectados retiran las denuncias. Llama la atención que siga aumentando la violencia doméstica, a pesar de que la pena llega hasta ocho años de prisión. Estadísticas indican que las provincias con más casos son Panamá, Chiriquí y Coclé, realidad parecida a la de los casos de violación carnal. Esto demuestra el exagerado machismo en esos sitios.

¿Por qué la violencia doméstica? En parte por el descontrol que sufren las parejas, especialmente varones. Desde hace años esa situación la ven ciertos como "normal". Hay que aclarar que esto no solamente lo sufre Panamá, sino toda Latinoamérica. Aunque lo dude, se dan casos en países desarrollados. Varios piensan que sucede principalmente en sectores bajos de la sociedad. Realmente no es así.

Se conocen casos en personas con altos niveles de instrucción, pero pocas veces llegan a los tribunales. Otro tipo de abuso contra parejas y niños es la "violencia psicológica", difícil de castigar porque no se puede probar fácilmente. Expertos indican que una relación está terminada cuando hay violencia. A veces la mujer soporta los golpes porque teme sobrevivir sin su pareja. Ahora las damas estudian y tienen independencia económica, y ponen fin a la situación con más facilidad.

Dicen que niños que ven violencia en su hogar, cuando grandes la repetirán con su familia. Habrá un "círculo" de esta mala conducta que se prolongará por años. Se debe poner más atención a esta triste realidad, desde diferentes aspectos.