Exposición y venta de artesanías, atractivo de grandes y chicos

Tembleques, diseños con molas y un sinnúmero de artesanías son un trabajo que a diario la señora Aleyda Ovalle realiza para la exposición, venta y hasta para tratar de entretenerse y disfrutar creando nuevas artesanías que son la atracción de grandes y chicos.

La dama de las artesanías en Aguadulce es Ingeniera Agrónoma de profesión y asegura que desde joven tenía esta admiración por artesanías y creaciones, pero siguió sus estudios y ahora que tiene más tiempo puede crear más y hasta logra en 15 días confeccionar una cabeza de tembleques que son muy gustados porque son de calidad y a muy buen precio.

Ella tiene a diario una exposición en Aguadulce en un centro de internet (Egolosine), pero es en su casa donde las confecciona junto a su hermana y asegura que es un pasatiempo positivo porque también genera ingresos y los vende baratos porque siente que no hay que exagerar con los precios porque se trata es de que todos compren sus creaciones.

La dama de las artesanías asegura también que trabajar en tembleques, tejer, coser molas es una terapia para ella, porque se transporta a un mundo de imaginación y creatividad donde todo es útil para hacer una artesanía, puesto que hasta con material reciclable laboran y el cliente queda encantado con lo que se hace.

Su mundo artístico se centra en la elaboración de los tembleques con perlas, canutillos y hasta con escamas de pescado, lo que requiere de mucho tiempo y dedicación, pero que para ella es un arte que poco a poco fue aprendiendo en cursos que ha tomado y que han sido muy provechosos.

"He participado en ferias a nivel nacional, en Coclé y en las fiestas del 19 de octubre en Aguadulce, donde logro buenos contactos para pedidos y realmente nos va bien porque el trabajo no es meter perlitas, es innovar crear una nueva flor, un nuevo producto y realmente que resalte el tapa moño o tembleque que hago y esto me da más clientes", dijo Aleyda.

Esta dama de las artesanías señala que una cabeza de tembleques las puede vender entre 200 y 250 dólares y trabaja con pedidos, pues considera que el trabajo bien dedicado da buenos frutos y es por ello que cada día tiene nuevas creaciones y hasta molas en sombreros que son muy gustados por los clientes.

Aleyda se inició en esta actividad hace 25 años, pero se perfeccionó una década atrás con cursos, y en los últimos diez años se ha dedicado de lleno a las artesanías y desde luego a su familia.

Para el 19 de octubre, tiene listos dos pedidos de cabezas de tembleques, costo promedio es de 250 dólares.