Provincias - 13/10/13 - 11:56 PM

Preocupación por muertes de niños en comunidad indígena

Según Milio Santos, de 50 años de edad, residente en la comunidad Quebrada Negra, en el distrito Kankintú, en la Comarca Ngäbe Buglé, área Ño Cribo

Por: - Domingo 13 de Octubre de 2013 11:56 PM

Leonardo Machuca G. / Bocas del Toro

Según Milio Santos, de 50 años de edad, residente en la comunidad Quebrada Negra, en el distrito Kankintú, en la Comarca Ngäbe Buglé, área Ño Cribo (antiguo territorio de Bocas del Toro), tres niños han muerto por tosferina: uno de dos años, otro de tres y un tercero que no sabe la edad.

Agregó que los decesos han sido registrados en las comunidades Guayabo y Sirote, sin embargo, según las autoridades hay casos afirmativos en Bongo y Camarón, todas esas comunidades están bastante distantes desde Kankintú; para llegar hay que caminar hasta tres días, y si son personas que no tienen buenas condiciones y van con equipos, pueden demorar una semana.

Nadia Tibibo, enfermera encargada en el distrito Kankintú, confirmó las muertes y dijo que una misión de salud fue hasta esos lugares y regresaron con muestras que enviaron a los laboratorios del Ministerio de Salud, y resultaron positivos.

Reconoció que desde hace unos cinco años, en el puesto de salud de Quebrada Negra, que es donde se atienden a los residentes de las comunidades aledañas, no hay neveras especiales para mantener en buenas condiciones las vacunas que ayudan a prevenir enfermedades; esas medicinas necesitan estar en temperaturas de entre 2 y más ocho grados para que sean efectivas.

Siguió diciendo que fueron comunicados de los casos en el mes de agosto, e inmediatamente acudieron; luego regresaron en septiembre y a partir de mañana 15 y hasta el 24 de octubre, nuevamente irán para seguir vacunando y revisando a los pacientes que dejaron el mes pasado con síntomas de la enfermedad.

Esta vez, a diferencia de las anteriores, les tocará ir a pie para ir de comunidad en comunidad. Por la distancia se calcula que demorarán 9 o más días, y tendrán que ir por caminos peligrosos por la cantidad de animales como culebras, escorpiones y alimañas, comunes en esas zonas montañosas.