Desgarrador adiós
Con honores post mortem fueron despedidos el sargento Hernando Córdoba y el cabo 2do. Juan Martínez, asesinados el fin de semana cuando cumplían con su deber en la Autopista Panamá-Colón, a la altura de Chilibre.
La solemne ceremonia se realizó la mañana de ayer, martes, en el patio frontal de la sede de la Policía Nacional en Ancón.
Más de un centenar de unidades policiales hicieron la calle de honor durante la llegada de los féretros forrados con el pabellón nacional. Un altar con las fotografías de ambos uniformados, rodeado de coronas de flores, fue puesto frente a los familiares, entre estos, padres, esposas y hermanos, y amigos de las víctimas. A las honras asistieron el presidente de la República, Juan Carlos Varela, el ministro de Seguridad, Alexis Bethancourt, y el director de la Policía Nacional, Omar Pinzón, así como otros funcionarios de los estamentos de seguridad y del Directorio Policial.
El Mandatario lamentó la pérdida de dos hombres asesinados en el cumplimiento del deber.
Expresó que “[...] el Gobierno brindará todo el apoyo necesario a sus familiares”.
Hizo un llamado a todos los panameños para “cerrar filas” en contra de los antivalores, la violencia y la delincuencia.
El kepí de los uniformados caídos fue entregado por el Director de la Policía a los deudos, quienes rompieron en lágrimas. Las resoluciones fueron entregadas por el Ministro de Seguridad.
La ceremonia religiosa cerró cuando un pelotón de uniformados, con armas largas, realizaron 21 disparos de salvas al aire, que retumbaron en los oídos de los presentes rompiendo el silencio solemne del momento. Seguidamente, los féretros fueron trasladados. El de Córdoba fue llevado al Cementerio Praderas de la Paz, en La Cabima, y el de Martín, al campo santo municipal de Arco Iris, en Colón.
Córdoba tenía 7 años de ser miembro de la Fuerza Pública. Dejó a un hijo en la orfandad. Martínez tenía dos años de ser miembro de la Policía Nacional y dejó en la orfandad a tres pequeños.
Las investigaciones siguen.
Cuatro miembros de estamentos de seguridad del Estado han perdido la vida en el 2017, en el cumplimiento del deber.