Desmantelan banda de "coyotes" que operaban en zona fronteriza

Las autoridades de Costa Rica realizaron una serie de operativos en diferentes puntos del sector fronterizo de Paso Canoas y la aprehensión de al menos unas 14 personas entre ellos tres unidades de la Fuerza Pública de este país, quienes formaban parte de una organización dedicada a trasladar cubanos de manera ilegal desde la frontera con Panamá hasta Peñas Blancas.

Dentro de los sujetos aprehendidos figura un taxista informal de apellidos Ramos Quiroz de 37 años,  residente en el sector de Ciudad Neily, cantón de Corredores, Puntarenas, y quien fue señalado por las autoridades como el líder de la organización  apodado "el Mago".

También fue aprehendido su brazo derecho, un individuo de apellido Carvajal Duarte, alias Flaco, quién según la Policía, este coordinaba el alojamiento y ocultamiento en las casas y, además era quien mantenía el contacto con las personas encargadas del transporte en vehículos particulares para estos cubanos.

Mientras que los tres sujetos  que se desempeñaban como oficiales de Fuerza Pública, fueron identificados como  Martínez Sánchez, Granados Lacayo y Narváez Delgado, quienes fueron aprehendidos en La Cruz de Guanacaste.

 

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La Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes continúa la investigación en contra de las 14 personas, quienes podrían ser acusadas del delito de trata de personas.

Producto de los allanamientos se logró obtener documentación relacionada con la investigación (comprobantes de transacciones bancarias, libretas, entre otros), así como teléfonos celulares, computadoras, y aproximadamente 33 mil balboas en efectivo.

 

Las autoridades de Costa Rica, iniciaron la investigación a principios del 2019, luego de que ingresara información confidencial a la Policía Profesional de Migración, en la que se indicaba que estas personas operaban en la zona sur del país,  en la frontera con Panamá a donde llegaban estos migrantes  presuntamente de la mano de coyotes panameños.

Según la prueba recabada, los montos que esta organización delictiva cobraba a las víctimas por el traslado de la  frontera de Panamá con Costa Rica a la frontera de Costa Rica con Nicaragua era de  unos 600.00 balboas aproximadamente por persona.

Se cree que las personas migrantes tenían como destino final Estados Unidos y, en su mayoría, eran de nacionalidad cubana.

 

El grupo, del cual se tuvo conocimiento a finales del 2018, alcanzó un alto grado de desarrollo, pues tenía casas de alojamiento, personas que alertaban sobre retenes policiales y una compleja red de transporte, donde esta organización, se estima que trasladaba grupos de cuatro a cinco cubanos en solo 24 horas.

Se presume que el grupo delictivo inició operaciones como una alternativa para los foráneos que no quisieran someterse a los procesos migratorios.

Actualmente, Costa Rica otorga un permiso de ingreso de tránsito a los migrantes, pero les exige pasar por los procedimientos de identificación, además de que se les exige visa de su paso por Panamá.