Entierran a sargento asesinada por su esposo
Escenas de llanto desgarrador se vivieron ayer en la Iglesia San Juan Bautista de Aguadulce, donde se realizó la misa de cuerpo presente de la sargento Araceli
Escenas de llanto desgarrador se vivieron ayer en la Iglesia San Juan Bautista de Aguadulce, donde se realizó la misa de cuerpo presente de la sargento Araceli Migdalia Aranda, miembro de la DIJ, que fue asesinada por su esposo, mientras desempeñaba su trabajo de custodia en el Hospital San Miguel Arcángel.
Una de las tías de la sargento no contuvo el llanto y pedía a su sobrina que se la llevara con ella, porque era doloroso vivir si ella. Tati, como cariñosamente la llamaba su familia, era de Aguadulce, pero tenía más de 20 años trabajando en la capital.
La familia pide que su esposo, también policía miembro de la DIJ, pague su crimen.
Silvia Sánchez es prima hermana de Tati y asegura que ella se fue hace unos 22 años para la Acapol a estudiar y a trabajar, y por allá se quedó viviendo con su esposo, el que acabó con su vida de forma tan violenta e inesperada.
“Mi prima tenía tres hijos, el mayor se está graduando de médico, uno de 17 y una niña de 14 años, que quedan sin su madre y también sin padre”, aseguró Silvia Sánchez, prima de Tati.
El féretro con el cuerpo de la sargento fue llevado en horas de la mañana a una residencia de una tía, de ahí a la capilla de la comunidad de El Coco de Aguadulce, y después lo llevaron a la Iglesia San Juan Bautista, donde se realizaron los oficios religiosos, para luego darle cristiana sepultura en el cementerio de Aguadulce.