Se echan a otro en San Joaquín

Operativo



01



Después del homicidio, la Policía Nacional realizó un operativo y un agente resultó con un rozón de bala en el brazo, tras quedar en medio de un tiroteo entre bandas.

En un punto crítico se encuentra la guerra de pandillas en los multifamiliares de San Joaquín, en el corregimiento de Pedregal.

En las últimas semanas se han registrado cuatro atentados: uno en contra de 21 integrantes de cuatro familias y dos homicidios, reveló un informe de la Policía Nacional.

Najal Sing, de 33 años, fue la última baja en la violencia que vive la comunidad de San Joaquín.

Sing recibió dos tiros en la tetilla izquierda y un tercero en el pie derecho, ocasionado por un delincuente que se acercó cuando participaba de una fiesta.

Malherido, Sing fue trasladado hasta el Cuarto de Urgencias de la policlínica JJ Vallarino, ubicada en el corregimiento de Juan Díaz, donde murió a las 11:20 p.m., según el diagnóstico del médico.

Cinco días antes, el 12 de febrero, Edwin Ameth Lewis Forero, de 28 años, fue acribillado por un asesino a sueldo cuando viajaba como copitolo de un taxi, en el corregimiento de Pedregal.

“Vaquita”, como era llamado en vida Edwin, recibió 11 tiros supuestamente por mantener diferencias con un grupo criminal que operaba en el lugar.

Funcionarios del Departamento de Homicidio de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ) informaron que se trató de un hecho de ajuste de cuenta, ya que el asesino fue directo a la víctima e ignoraron al taxista, que resultó ileso.

Las pandillas de Los Mataperros y Los Perros de San Joaquín tienen una guerra sin cuartel, con muertos de ambos lados, según la Policía Nacional.

Por ahora, los investigadores buscan determinar si el homicidio de Najal forma parte de la “vendetta” o de otra guerra aparte que se vive en el lugar.

En 2013, hubo 10 homicidios, en San Joaquín. Este año van dos.