Viva - 10/12/13 - 07:30 PM

Hugo no rehuyó su cita con la parca

La obra que relata la vida del médico panameño, Hugo Spadafora, ha recibido buenas críticas por parte de los especialistas en literatura.

Por: - Martes 10 de Diciembre de 2013 7:30 PM

Rosalina Orocú Mojica

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Temerario y extremadamente confiado. Así era. También, dispuesto a servir a su Patria. Siempre.

Y admirador del credo bolivariano.

Hugo Spadafora sabía que Noriega lo tenía en la mira. Había recibido varias advertencias del general: una de ellas con su amigo Abdiel Juliao.

Esas amenazas de muerte, más de tres, y las noticias de que Noriega no le perdía pisada, parecían preocupar más a su familia (sus hermanos, su padre Melo, su hermano Winston y Arianne, su segunda esposa).

"...el jueves 12, cuando apenas hacían dos semanas de su último viaje a Panamá", Hugo Spadafora "se levantó temprano como cada día, ojeó el periódico leyendo solamente aquellas noticias que le hacían sentirse medianamente informado, buscando casi siempre asuntos relacionados con las guerrillas en Centroamérica o con Panamá, y luego hizo un poco de gimnasia y sus ejercicios de Yoga".

Así lo relata Amir Valle en su libro "Hugo Spadafora: bajo la piel del hombre", donde cuenta la vida y obra del médico guerrillero panameño que fue asesinado el 13 de septiembre de 1985.

Sigue diciendo Valle que Hugo le comentó a su esposa Arianne: "Es raro...me desperté con una sensación muy fuerte de que algo muy, pero muy grave va a pasar en Panamá y que es muy importante que yo esté allí".

A diferencia de otras veces, en que cruzaban juntos la frontera, esta vez, él decidió que ella viajese en avión y se encontraran en Panamá. El cruzaría furtivamente de un país al otro. Estaba acostumbrado a hacerlo.

Nunca imaginaría el maquiavélico plan del General Noriega.

"-TENEMOS AL PERRO RABIOSO- LE DIJO A NORIEGA el mayor Luis "Papo" Córdoba. La voz tenía el tono típico de las conspiraciones e incluso se percibía algo de nerviosismo en las palabras".

Así inicia Amir Valle el XVI y penúltimo capítulo de la obra.

En el primer capítulo (Pág. 15), escribió:

"Era 13 de septiembre de 1985.

Viernes 13.

Y aunque su primea esposa, María Elena, y algunos otros amigos se pasaban la vida burlándose por esa ingenuidad con la que, al menos en un primer momento, aceptaba cualquier historia de magias y conjuros y maldiciones, no pensó siquiera que había escogido para viajar un día que las creencias populares designaban como maldito..."

Esta información aparece en esta publicación de Santillana (Editorial Aguilar) y también que fue un 13 de noviembre, también de 1985, cuando el padre de Hugo, Carmelo, fue a su encuentro. Falleció, producto de un infarto.

En la voluminosa biografía novelada de Hugo Spadafora -escrita por Amir Valle luego de entrevistar a más de 200 personas que lo conocieron y de investigar en Panamá, Washington, Costa Rica, Nicaragua y otras naciones- hay mucho de providencial y también hechos extraños- alta percepción psíquica de varios de los personajes más ligados a él, quizás- que llaman la atención.