En Panamá se registra un promedio entre 150 a 195 casos de suicidios al año, y son las provincias de Herrera, Los Santos y Coclé las que presentan mayor incidencia.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se calcula que cada año a nivel mundial se cometen 900,000 suicidios, esto significa una muerte cada 40 segundos.
El suicidio se encuentra entre las tres primeras causas mundiales de muerte en personas de 15 a 44 años.
Un 50% de las personas con tendencias suicidas sufren de depresión; sin embargo, en los adolescentes esta conducta se asocia a problemas de noviazgo, bajo rendimiento escolar, disfunción familiar o en cómo se maneja el entorno por la educación de los padres, explicó la Dra. Juana Herrera, directora del Instituto Nacional de Salud Mental (INSAM).
En tanto, el psiquiatra Edgar Adames asegura que el individuo que intenta quitarse la vida -decisión que no es la más correcta, porque todo en la vida tiene solución- por lo general presenta algunas señales claras.
El suicida siente un dolor emocional que se le hace insoportable, se siente desesperado, piensa que nada cambiará en el futuro, que no puede contar con nadie que le dé su apoyo y no ve más salida a su sufrimiento que la muerte, elección que no es la correcta, enfatizó el psiquiatra.
Destacó que en Panamá, aunque las mujeres son las que realizan más intentos de quitarse la vida, los hombres son más efectivos.
Para el especialista, la autoestima juega un papel fundamental en la toma de decisiones de un individuo. "Si una, persona tiene baja autoestima sentirá que sus problemas son los más graves y, en el peor de los casos, elige el camino incorrecto".
TOLERANCIA ES LA CLAVE
Una persona que intenta quitarse la vida siempre envía sus señales y, ante este panorama, sus familiares y amigos deben hacerle saber cuán importante es para ellos; deben escucharlo, ser tolerantes y por ningún motivo deben criticarlo, ni mucho menos burlarse.
Nunca tome a relajo las amenazas, es más, si los comentarios son muy seguidos, lo más recomendable es que se busque ayuda profesional.
Según Adames, los familiares deben estar alerta a los cambios de actitud del individuo porque muchos suicidios se producen en una fase de mejoría, cuando la persona tiene la energía y la voluntad para convertir sus pensamientos desesperados en una acción destructiva.
RECOMENDACIONES
Si alguna vez se siente deprimido, trate de animarse y recuerde que en la vida todo tiene solución.
- Evite las drogas y el alcohol. La mayoría de las muertes por suicidio son por un impulso repentino.
El hecho de que no pueda pensar en otra solución que no sea el suicidio no significa que no exista. Su depresión está alterando su capacidad para pensar. Amigos, familiares y terapeutas pueden ayudarle a encontrarla. - Haga una lista con las cinco personas a las que podría recurrir.
- Prométase a sí mismo que si piensa en suicidarse dejará de lado momentáneamente esas ideas y llamará a la primera persona de la lista, y que si esa persona no lo toma en serio o no le da el apoyo que necesita, llamará a otra.
- Escriba acerca de sus metas, sus esperanzas y deseos para el futuro y sobre las personas que valora en su vida. Léela cada vez que necesite recordar por qué su vida es importante.
- Hable con las personas que son importantes para usted y cuéntele lo que le pasa, de forma que puedan estar preparados si aparece una crisis suicida.
