El ministro de Asuntos del Canal de Panamá, Rómulo Roux, aseguró ayer domingo, que los niveles de turbiedad en la potabilizadora de Chilibre están por debajo de las 5 unidades nefelométricas (que, según la Organización Mundial de la Salud, es lo mínimo para consumo humano), pero aclaró que aún el agua no es apta para beber.
Roux manifestó que mientras se normalice la situación en el agua, continuarán distribuyendo agua embotellada a los corregimientos más necesitados como Las Mañanitas, Pedregal, Alcalde Díaz, Tocumen, Juan Díaz, Río Abajo, Parque Lefevre, Victoriano Lorenzo, Mateo Iturralde, Arnulfo Arias Madrid, y otros lugares.
El pasado sábado se repartieron 700 mil botellas de agua. Así mismo indicó que seguirán repartiendo agua a través de carros cisterna.
El funcionario dijo que en la potabilizadora, actualmente se realizan trabajos de limpieza en los sedimentadores y, en este momento, se ha iniciado el lavado de las tinas sedimentadoras.
Por otra parte, Roux aseguró que se encuentran realizando estudios con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), en la cuenca del lago Alajuela, para evaluar las medidas que se pueden adoptar para que la erosión y la turbiedad en la potabilizadora no sean tan graves en caso de que se repitan fuertes lluvias como las del pasado mes de diciembre.
