Una jubilada que pidió un crédito bancario para poder pagarle al pistolero que contrató para matar a su hijo fue arrestada en Brasil.
Amara da Conceicao da Silva, de 76 años, fue detenida tres semanas después de que su hijo, Cícero Félix Dionisio, de 46 años, fuera asesinado a tiros en la ciudad brasileña de Recife, nordeste del país, en un caso del que la policía carecía de pistas.
La acusada, sin poder dar explicaciones sobre la deuda, terminó confesando que pidió el préstamo para poder pagarle al pistolero Milton José de Araújo, que también fue arrestado.
Los acusados alegaron inicialmente que la madre estaba cansada de que su hijo la maltratara y golpeara.
La policía, sin embargo, sospecha que el motivo del crimen era la divergencia entre madre e hijo sobre el destino de la casa en el que vivía la familia, valorada en unos 17.000 reales (7.390 dólares).