Permanece la mayor parte del tiempo descansando, debido a que no puede afirmar el pie izquierdo, del que fue intervenido hace semanas en el quinto metatarsiano.
José Luis Garcés habló ayer vía telefónica desde su residencia en Sofía, Bulgaria, donde se encuentra con su esposa Siarys y sus hijos, a quienes señala como la fortaleza para luchar contra el difícil momento que vive a causa del infortunio sufrido en un entrenamiento con su equipo durante una gira por España.
Hasta la fecha, la sombra de las lesiones que afecta a tantos deportistas había sido benévola con Garcés. Ahora permanecerá cerca de dos meses sin jugar, aunque soñando con hacerlo. Cuando militaba en el Nacional de Uruguay tuvo una fractura en la cara que lo dejó fuera unas semanas.
DESEOS DE VOLVER
El fútbol es su vida, así lo afirma y lo ratifica. Tiene retos inmediatos, como salir campeón de Bulgaria con el CSKA Sofía y vestir los colores de la selección de Panamá en la eliminatoria ante El Salvador.
De igual forma, "Pistolero" confiesa que espera volver a hacer dupla con su compadre Luis Tejada, quien vive un momento dulce en la liga colombiana. "Siempre hablo con él, nos llamamos. Le doy gracias a Dios por que está haciendo goles, ya que tuve que superar momentos duros".
"Ojalá me pueda recuperar lo más pronto posible y revivir esos buenos ratos con Tejada en la selección", agrega.
Tras la lesión, señaló que pocas personas lo han llamado, aunque sí ha mantenido comunicación con su familia, quienes estuvieron muy preocupados por la operación.
"Siempre me comunico con mi gente en Puerto Caimito, ellos estaban muy preocupados con la operación, yo los tranquilicé, les dije que son cosas del fútbol, Dios lo quiso así y solo queda resignarse y regresar", concluyó.