Las decenas de miles de "camisas rojas" que están concentrados en Bangkok para exigir elecciones anticipadas continuaron sus actos simbólicos contra el Gobierno como el de pintar con sangre donada la verja de la residencia del primer ministro, Abhisit Vejjajiva.
Varios centenares de policías y soldados formaban tres cordones de seguridad en torno a la vivienda, ubicado en una lujosa zona residencial de Bangkok.