Con incertidumbre empezarán el año escolar educadores que laboran en áreas de difícil acceso en el Norte de Santa Fe, en la provincia de Veraguas y parte de la Comarca Ng�be Bugle.
En estas apartadas regiones del país hay comunidades como Llano de Piedra y Palizada en donde las escuelas y los dormitorios de los educadores son de tipo rancho, construidas de pencas, madera, caña blanca, barro y viejas hojas de zinc.
Son estructuras que no reúnen las condiciones básicas para recibir estudiantes, las que cada año representan un peligro tanto para los educadores, como para los alumnos.
El 20 de mayo de 2007 una cabeza de agua arrastró a un grupo de docentes que se dirigían a sus puestos de trabajo en el distrito de Kusapín, en la Comarca Ng�be Buglé. En ese incidente murieron dos educadoras y el hijo de una de ellas, que las acompañaba.
Julio González, educador de la escuela primaria de Llano de Piedra, fue uno de los sobrevivientes de este trágico incidente, quien dijo que ya se cumplirán dos años y las autoridades de educación no cumplen las promesas.
Reveló que, luego de la tragedia, hubo una serie de compromisos, pero que a la fecha no se ha visto nada y como educadores continúan arriesgando sus vidas cada vez que van a sus puestos de trabajo.
Comentó que en su condición de sobreviviente ha realizado peticiones, pero que nunca tiene una respuesta favorable, "al final no buscamos beneficios personales, sino mejores condiciones para laborar".
Señaló que no sólo el acceso es un problema, sino el hospedaje, la escuela, "imagínense que las sillas son hechas de troncos, que se consiguen el la comunidad".
Explicó que tienen que caminar ocho horas para llegar a la escuela, cuando el tiempo lo permite, porque de lo contrario tienen que dormir a orilla de los ríos, y les toma hasta uno o dos días.
Yanina Mendoza, maestra de la escuela primaria de Palizada, al norte de Santa Fe, indicó que el rancho donde imparten clases no son los mejores, pues cuando llueve, el agua se mete por todas partes.
Juan Herrera, Secretario General de las Asociación de Educadores Verag�enses, señaló que desde "hace años están solicitando que las escuelas ranchos sean eliminadas, porque representa a una barrera para el proceso de enseñanza".
El Ministerio de Educación debe garantizar la condiciones básicas de las escuelas.
En tanto la directora Regional de Educación en Veraguas, Bélgica Canto, sostuvo una reunión con los educadores que laboran en áreas de difícil acceso, donde escuchó los planteamientos y las sugerencias.
