La Pintada, un pintoresco lugar turístico se ha convertido en un sitial de gran interés por sus paisajes, pero sobre todo llama mucho la atención de turistas y visitantes la tradición de su gente, las artesanías confeccionadas con fibra vegetal en donde el sombrero pintado se ha convertido en el más selecto de todos, ya sean ricos y pobres.
En un recorrido que realizamos a esta comunidad, observamos entre otras cosas las casas de artesanías que están abiertas a todo el público en donde no sólo las venden, sino que enseñan su confección.
El señor Reinaldo Quirós, propietario de una de las casas de artesanías de La Pintada, cuenta que a su local llegan muchas personas, entre ellos turistas de diferentes países, incluyendo Panamá, los que se maravillan al ver la variedad de sombreros que él y su familia confeccionan para la atracción de los que los visitan.
Este local se ha convertido en una atracción turística, ya que la gama de sombreros y artesanías para recordatorios es la característica del mismo, que por años ha tratado de innovar con cosas diferentes de otros puestos.