Es un fenómeno que se da desde pequeños: el síndrome del lunes.
Tal vez usted se encuentre un poco confundido, pero nos referimos a esa falta de deseo de que llegue el lunes, pues el fin de semana le ha resultado placentero.
Ciertos especialistas en el tema indican que los lunes se dan ciertos fenómenos con más frecuencia que el resto de los días laborales.
Entre los mismos están los accidentes de tránsito, los infartos o la pereza mental.
"Lunes otra vez, sobre la ciudad" rezaba una canción que nombraba al primer día hábil de la semana, el día de las dietas después del asado del domingo, de volver al colegio después del fin de semana, de sentarse en el trabajo después de haberse relajado.
Según explican los conocedores, con todas las contras y los pocos pro que implica, es uno de los días más peligrosos, ya que durante éste se produce lo que muchos denominan "síndrome de los lunes" y se hace presente ese estrés de comenzar la semana.
Por otro lado, el estrés de afrontar la semana laboral no puede ser la única causa, sino también el dormir mal durante el fin de semana o el alimentarse en exceso.
Una cosa sí es cierta, el hecho de que se dé un estupendo día depende del ánimo y la actitud de cada persona.