El simple hecho de ser mujer permite que ésta disfrute de ciertos privilegios, por lo que empieza a desarrollar unas que otras habilidades.
Ahora, hay que entender que no todo lo que la fémina hace o intente hacer lo hace por interés, porque ante todo muchas piensan en el amor.
Bueno, en una relación de pareja se da el coqueteo mismo que lleva a la entrega íntima, pero a veces muchos, en especial los hombres, pueden confundir esa sensualidad de la mujer coqueta con el hecho de pensar que quiere algo, aunque en algunos casos puede ser así.
Claro está, existe una serie de señales femeninas bastante claras que les sugieren a los hombres que una mujer se encuentra receptiva hacia sus avances amorosos. Para averiguarlo, resulta clave aprender a interpretar el lenguaje corporal.
Y es que se calcula que entre un 60 y un 70% de lo que comunican los seres humanos se transmite por medio del lenguaje no verbal, que suele ser más significativo que las palabras.
La mujer es bastante más sutil e indirecta que el varón cuando se trata de revelar sus intereses románticos, aunque hay algunas señales inequívocas que delatan el interés de alguien.
Por eso, aquí te damos algunas claves que hay que tener en cuenta para no llegar a conclusiones engañosas, que pueden terminar en un odiado "no":
No ignores lo obvio: El lenguaje corporal es un indicador muy bueno de las intenciones de otra persona. Use su sentido común.
Evita basarte en un sólo gesto: Busca conjuntos de al menos dos o tres "señales corporales" que apunten el mismo sentido.
Confía en tus instintos: En lugar de centrarse obsesivamente en el detalle, deja que tu propio cuerpo reaccione instintivamente.
LO QUE ELLA HACE PARA INSINUARSE:
- Algunas mujeres sacuden o se echan atrás el pelo con un movimiento de cabeza; otras lo hacen con la mano.
- Envía unas típicas "miraditas de reojo", o lanza miradas cortas y repetidas en su dirección. Una mirada directa a tus ojos también cuenta.
- Habla en un tono de voz bajo, que invita a la intimidad. Si ella baja la voz, le está invitando a compartir su espacio personal.
- Mira mucho a la boca. Cuanto más encaprichada está una mujer, más tiempo empleará en mirarle la boca cuando hablen.
- Se acaricia suavemente la parte exterior del muslo. Esto se hace inconscientemente para llamar la atención a una parte del cuerpo.
- Muestra las muñecas. Son una zona erógena bien definida.
- Sonríe ampliamente. Una sonrisa enorme y genuina, enviada con un contacto ocular directo, sigue siendo la señal más clara de todas de que ella quiere que se acerque a ella.
