La presencia de maleantes que constantemente deambulan por las barriadas María Leticia y Villa Las Lomas, en el corregimiento de Barrio Colón en La Chorrera, mantiene alarmados a sus moradores que han tenido que pedir apoyo de la Policía Nacional, por lo que se ha incentivado las rondas a pie y vehicular, para alejar a los amigos de lo ajeno de ese sector.
Vecinos de la calle Poinzata señalan que varias familias ya han sido víctimas de los forajidos que aprovechan las horas del día en que algunas casas se encuentran solas, para cometer sus fechorías, incluso en una de estas residencias se encontró hace pocos días, un gato para abrir las ventanas, pero al parecer no les alcanzó el tiempo.
Igualmente, en la calle Begonia, que queda atrás de la Poinzata, ya en una ocasión una residente se encontraba sola en su casa en horas de la noche y al entrar a su habitación se encontró con que dentro estaba un ladrón, pero por suerte en ese momento llegó su esposo.
Aparentemente, en esta barriada los ladrones se ocultan en los terrenos baldíos que están detrás de algunas viviendas, y cuando todos se duermen, salen a ver a dónde se pueden meter.
Señala una de las residentes en Calle Begonia que últimamente, como no se pueden meter a las casas, están robando los equipos de sonidos de los autos, aprovechando que algunas casas no tienen cerca de verja.
A raíz de esta situación, los moradores de la Calle Begonia se han reunido con la Policía Nacional, a fin de que brinden mayor vigilancia en el área, y la respuesta ha sido efectiva, ya que "todos los días hay un policía que viene a patrullar de día y de noche".
La policía ha dado algunas recomendaciones a los residentes, como el no dejar escaleras fuera de las viviendas, porque eso mismo les sirve a ellos para subirse a las viviendas; objetos contundentes con los que puedan romper las ventanas y poder robar con mayor facilidad.
Por iniciativa de los propios vecinos, se intercambian los números de teléfono para dar la voz de aviso en caso de que se observe algún movimiento sospechoso, de parte de personas extrañas que se observen deambulando por el lugar.