Hace 22 años murió un ícono de la cruzada civilista, se trata de Carlos Efraín Guzmán Baules, quien fue abatido en una marcha realizada por los civilistas en San Miguelito, que pedían que se hiciera justicia por la decapitación de Hugo Spadafora.
La mañana lluviosa del 13 de septiembre de 1987, Carlos Efraín Guzmán Baules asistió a la marcha, que fue bien concurrida, sin presentir lo que le ocurriría.
Cruzar el puente de San Miguelito era la meta para los civilistas que habían convocado a la marcha, la cual había sido notificada una semana a las autoridades por el dirigente Carlos Ernesto González de La Lastra.
A la altura del puente que une la vía Domingo Díaz y la vía Ricardo J. Alfaro habían unos culecos en pleno mes de septiembre. Cuando los civilistas avanzaban, tres sujetos comenzaron a disparar, hirieron a muchos y acabaron con la vida de Guzmán Baules, a quien una bala se le alojó en el cráneo.
Carlos Guzmán hijo ayer manifestó que ese trágico día el pueblo panameño salió a luchar por el país que tenemos hoy, por lo que tenemos que recordar estos episodios para ver hacia adelante.
Guzmán Baules era oriundo de la Alanje, Chiriquí; nació un 26 de abril de 1938 y murió a la edad de 49 años. Es descrito por quienes lo conocieron como un luchador incansable y como un hombre trabajador.
Vendió periódicos, pintó casas, todo con tal de llevar el sustento a su hogar conformado por su esposa y sus tres hijos. Al momento de su muerte, tenía un pequeño negocio de venta de tortillas.
