La ciudad necesita un verdadero transporte masivo y las autoridades reconocen que el Plan para modernización del transporte masivo y movilidad urbana "Transmóvil", un proyecto asesorado por el BID y la Agencia de Cooperación Andina, es una "curita" para la gran herida. Este sistema tendrá una vida útil de 10 años, pero serán las administraciones venideras quienes elegirán la verdadera solución al problema, ya sea implementando un monorriel o un tren ligero. Sin embargo, las asociaciones de usuarios advierten que se debe hacer una consulta pública, si al final serán ellos (los usuarios) quienes tendrán que pagar por el servicio.
Heraclio Batista, director de la Autoridad del Tránsito y Transporte (ATTT), tiene en su oficina, frente a su escritorio, una réplica en miniatura de un "diablo rojo" y no un modelo del autobús que será la insignia de Transmóvil o cualquier otro proyecto de transporte masivo que pretenda implementarse en Panamá. �Les tiene cariño o es un trofeo?
Para que atendiera a Crítica tuvimos que esperar 7 horas y coordinar la entrevista para otro día, luego de que se había pautado desde hace 15.
No importó esperar. Luego de que hiciera un diagnóstico de la situación, donde recalcó que el transporte es uno de los temas más complejos para el país, reconoció que no será este gobierno quien solucione el problema implantando un nuevo y requerido sistema de transporte masivo en Panamá.
"Dejamos la decisión para que otra administración sea quien diga qué sistema de transporte quieren, ya sea tren ligero, monorriel o el que elijan", recalcó Batista.
Para el director, la actual administración se ocupa en rescatar el sistema que está enmanos de los transportistas debido a que tienen los certificados de operación que han hecho que por más de tres décadas el transporte funcione con cada unidad y su dueño como una empresa individual.
Para Batista lo importante es mantener la paz social y el tema de transporte es muy sensitivo, ya que tiene componentes sociales, económicos y técnicos.
"Nos hemos puesto una camisa de fuerza. La población no puede enfrentar un aumento en el pasaje, pero el usuario pide una mejor calidad de servicio. Así es que el Estado lo ha subsidiado con el sistema de estabilización tarifaria en los precios del combustible, que al año significan 20 millones de dólares, no para beneficiar a los transportistas, sino para evitar aumentos y beneficiar a los usuarios", explicó.
Ilusión por un mejor transporte Para ofrecer un mejor servicio es que surge Transmóvil, un proyecto que tiene aún está en su cuna y que sólo tiene una vida útil de 10 años y para que sea efectivo debe contar con 9 componentes que caminan a paso lento.
Batista argumentó que todo tiene su cuota de sacrificio y el Estado no podía montar ningún sistema nuevo si no se mejoraba la viabilidad de la ciudad.
"Si no lo hacemos, aquí no podíamos andar. Con el tiempo veremos los beneficios cuando estas obras queden montadas", recalcó, aunque también reconoce que Transmóvil es una decisión tardía, porque el país debió evolucionar anteriormente.
"Estamos haciendo la reingeniería de un sistema, una migración ordenada hacia el futuro. No hay vuelta de hoja y seguiremos con el proyecto".
El proyecto, que se consolidó con asesorías del Banco Internacional de Desarrollo (BID) y la Agencia Andina de Cooperación Cooperación Internacional, plantea hacer del transporte una empresa dominada por dos concesionarias privadas. Así se plantea en el proyecto que a través de una licitación se les otorgará la operación del transporte público.
Estas dos empresas, según explicó Batista operarán con los 1, 500 buses que adquirirá el Estado y se abastecerán sus dos rutas, la Noreste Centro (NEC) y la Sureste Centro (SEC), por rutas internas o alimentadoras. En este renglón es que los actuales transportistas podrán participar, siempre y cuando se organicen.
En cuanto a la ruta NEC, se extenderá desde el área de Alcalde Díaz y Las Cumbres hasta el centro de la Ciudad, utilizando la Avenida Transístmica y el Corredor Norte.
En tanto, la ruta SEC proveerá el servicio de transporte desde las comunidades vecinas de vía Tocumen hasta el centro de la Ciudad de Panamá utilizando la vía Domingo Díaz, Vía España, Avenida Balboa y el Corredor Sur.
Es por ello que el director de la ATTT recalca que Transmóvil es un sistema troncoalimentador, al que más tarde hay que añadirle un verdadero sistema de transporte masivo (tren ligero o monorriel).
�No se toma en cuenta a los usuarios?
Para Esperanza Mena, de la Fundación para la protección de los usuarios del transporte público, Trasnsmóvil es un proyecto del Estado entre algunos transportista y el Ejecutivo. Recalcando así que se excluyó la voz del usuario.
"El Transmóvil es muy bonito en la televisión y en la propaganda que hace el gobierno, pero el gobierno no le dice nada a los usuarios, ni siquiera con los que nos representan en la junta directiva de la ATTT", expresó enojada.
Según Mena, el usuario necesita más información sobre Transmóvil, porque la ciudadanía lo desconoce.
"Llámese metro o monorriel, en Panamá se necesita un mejor servicio y un mejor sistema de transporte masivo de pasajeros. La ciudadanía debe ser llamada a opinar, porque somos nosotros quienes lo vamos a pagar".
La queja de Mena se sustenta en que desde el mes de abril la Junta Directiva de la Autoridad del Tránsito no se reune como se acordó, una vez al mes, y en ella hay cuatro representantes de los usuarios. Sin embargo, denunció que el Estado se reune más con las comisiones de los transportistas.
"Si se toman medidas deben ser con la participación ciudadana, para que se den propuestas y sugerencias. Se necesita hacer una consulta real", recalcó.
Pese a lo anterior, en el discurso en el que se anunció el proyecto Transmóvil, el presidente de la República señaló que con este proyecto los ciudadanos tendrán la tranquilidad y la seguridad de que se implementará un plan coherente y que podrá ser evaluado, paso a paso, en el tiempo.
"Nosotros estamos entregando a la población un Plan que nos llevará a un sistema de transporte moderno. El problema no queda aplazado. Quedarán pendientes los pasos finales para darles a la capital y a San Miguelito el sistema de transporte público que merecen".