Las montañas de basura vuelven a acumularse en Nápoles, donde cerca de 600 toneladas esperan a ser recogidas, según datos proporcionados por el Gobierno civil de la ciudad.
"En la zona se han abierto cinco vertederos, donde hay espacio para millones de metros cúbicos de basura, se ha comenzando una seria campaña de reciclaje de residuos y funciona la incineradora de Acerra. No se entiende lo que está pasando en Nápoles. Hay algo que no me cuadra", dijo el jefe de la Protección Civil italiana, Guido Bertolaso.
El concejal de higiene, Paolo Giacomelli, explicó que la situación se ha agravado debido a que 68 conductores de los camiones de basura no se presentaron a trabajar.