Dos revólver calibre 38, una pistola 45, otra de juguete y 7 municiones sin detonar era lo que tenía Wilfredo Ariel González, de 32 años, quien quedó detenido por posesión ilícita de las armas.
González se encontraba, la noche del miércoles, frente a un local comercial en Cerro Batea, San Miguelito, cuando fue retenido por unidades de la Policía Nacional. Sin embargo, no sólo cayó preso él, sino que también un joven de 19 años que le acompañaba en el momento.