La PTJ remitió a la Fiscalía Auxiliar un informe preliminar sobre las pruebas realizadas a las armas de los agentes del SPI, investigadas tras la muerte de la empresaria Gina García Eleta, al quedar en medio de un intercambio de disparos entre asaltantes y miembros de ese cuerpo de seguridad.
De las 30 armas revisadas, hay sospechas de un grupo de 5, de una de las cuales pudo salir la bala que cobró la vida de García, en las afueras de la agencia del IDAAN de Corozal.
De lo que sí no hay duda es que la 9 milímetros con la que se ultimó a Gina era del SPI. Ahora se analizan dos casquillos aportados el viernes por la Fiscalía para tratar de definir cuál fue el arma.
Además se investiga un faltante de $6,000 del botín que formaba parte del asalto.