Los gerentes de la tienda Barneys, en Los �ngeles, no están nada felices con tener entre sus clientes VIP a Victoria Beckham.
Victoria ha devuelto algunas prendas que ha comprado en la tienda, pero como la mujer de Beckham, manda ajustar las prendas a la medida de su cuerpo, esas piezas son prácticamente imposibles de vender.