Durante los 13 días de huelga médica que los 3.5 millones de panameños vienen sufriendo en sigilo se han apagado vidas que no volverán, mientras tanto conversaciones van y conversaciones vienen, sin resultados esperanzadores.
Los dirigentes de la Comenenal no ceden en sus demandas, el gobierno tampoco da su brazo a torcer, en medio de un escenario de dolor y sufrimiento donde la vida no tiene valor, lo que importa es quién se impone en esta puja inhumana de quién puede más.
Acaso la ciudadanía que no tiene representación en estas negociaciones, no tiene derecho a ser escuchado en estos encuentros donde el gobierno y médicos discuten sobre la salud de la Nación.
Una verdadera negociación, donde se habla de mejorar la calidad de la atención médica, tiene necesariamente que incluir a los principales interesados, que son los panameños, que sufren en carne propia las deficiencias del sistema de salud público.
Por favor, hasta cuándo nuestras autoridades y los gremios seguirán actuando tras bambalinas, haciendo sus acuerdos y negociaciones sin tomar en cuenta las opiniones justas de la población, como debe ser en una verdadera sociedad que se precie de ser democrática.
Los pacientes deben estar representados, pero por dirigentes no comprometidos con una u otra parte, sino que defienda los intereses de esos panameños que deben madrugar para obtener una cita médica o esperar meses para ser atendido por un especialista.
Viene otra semana de incertidumbre para quienes esperan cirugías, consultas externas y la ansiada cita con los especialistas. No estamos hablando de mercancías que vamos a comprar o a vender!. !Estamos hablando de la salud del pueblo! !Estamos hablando de vidas humanas!.