Las artesanías, aparte de ser una actividad productiva y sustento de muchas familias, es también una evidente manifestación artística. Los artesanos se caracterizan por usar materiales típicos de su zona de origen para fabricar sus productos con sus propias manos. Cada uno con materiales diferentes y que identifican el entorno de cada exponente.
De esta manera, la artesanía, cual embajadora, refleja la identidad de cada región y promueve la cultura de cada pueblo viajando alrededor del mundo.
Una de las artesanas que se ha destacado por más de seis años en la provincia de Chitré es Mercedes Murillo, quien ha heredado de su padre sus dotes artísticos.
Para Murillo, la artesanía, aparte de ser un trabajo, es una tradición que ha llevado su familia por muchos años.
Las cerámicas que fabrican -además de representar un adorno para la casa- llevan un largo proceso, desde su confección hasta la venta. Primero deben ser confeccionadas y de este paso se encarga uno de sus tío; luego se procede a pintar y aquí es donde entra en escena Mercedes, quien aprendió a pintar desde chica viendo a su papá y, con el pasar del tiempo, adquirió conocimientos y destrezas en este arte.
Explica Mercedes, que para que todos los artículos artesanales que ellos confeccionan queden bien pintados, hay que dedicarle mucho tiempo, lo primero que se le debe poner es una base; en este caso, debe ser de color negro, también puede ser roja, pero este punto depende del gusto del comprador, al igual que los colores y el dibujo que prefiera.
La pintura que se utiliza es la acrílica, las artesanías son pintadas a mano, por lo que la dedicación es la clave para la pintura, al día son pintados más de 30 juegos que son llevados al puesto artesanal que posee la familia en la Arena de Chitré.
