Sólo tres días restan para el esperado clásico de vuelta del fútbol español entre el Real Madrid y Barcelona, y las expectativas crecen a medida que se acortan las horas. Ayer, el presidente del club blaugrana, Joan Laporta, reconoció que el equipo catalán tiene más en juego el domingo y destacó que el encuentro en el estadio Camp Nou reviste de mayor importancia para el Barsa porque juega como local, y porque una derrota lo dejaría rezagado a siete puntos del líder Madrid en la tabla de posiciones.
"Nos jugamos más que el Madrid porque jugamos en casa y nos interesa acortar distancias. Estamos más obligados a ganar", dijo Laporta durante la comida de Navidad con la prensa española.
Un triunfo dejaría al equipo catalán a un punto del Madrid rumbo al receso de Navidad.
Raúl González por su lado, opinó que su equipo llega con ventaja al clásico porque ocupa un lugar ideal en la tabla, aunque advirtió que será un partido complicado a pesar de que sus rivales no contarán con el astro argentino Lionel Messi.