Hilario Zapata quiere aportar más al boxeo panameño
Hilario Zapata (der.) recibe la medalla Dr. Elías Córdova por parte del presidente de la Comibox de Panamá, Jaime Salas. Fotos: Anayansi Gamez
Hilario Zapata estuvo acompañado por varios excampeones mundiales panameños en la actividad.
Hilario Zapata junto a los miembros de la Comisión de Boxeo Profesional de Panamá.
El excampeón mundial Ricardo Córdoba (der.) y el vicepresidente del CMB y actual subdirector de Pandeportes, Alberto Guerra.
El excampeón mundial Anselmo “Chemito” Moreno (izq.) junto a su esposa Rouss Laguna.
Hilario Zapata estuvo acompañado en el acto por su esposa, hijos y nietos.
Por: Joel Isaac González [email protected] -
El excampeón mundial Hilario “Bujía” Zapata tuvo varios logros como boxeador. Logró coronarse campeón mundial y gracias a su exitosa carrera fue exaltado al Salón de la Fama del Boxeo Mundial, en Canastota, Nueva York.
En agradecimiento a sus logros, la Comisión de Boxeo Profesional de Panamá (Comibox), en su cena anual realizada la noche del miércoles, lo honró con la medalla Dr. Elías Córdova, la máxima condecoración que se otorga en este deporte en Panamá.
Con la presencia de excampeones mundiales, dirigentes del boxeo nacional e internacional, miembros de la Comibox de Panamá, miembros de la Asociación de Jueces y Árbitros de Boxeo (Ajabox) y comunicadores sociales se llevó a cabo este acto que tiene mucho significado para el boxeo panameño.
Durante la actividad se realizó una reseña de la trayectoria de Zapata como boxeador, la cual estuvo a cargo del periodista Daniel Alonso, de Lo Mejor del Boxeo.
Al recibir la medalla, Zapata agradeció por el homenaje de la Comibox y además de los títulos mundiales que obtuvo, resaltó como su cuarto cetro mundial el haber vencido su adicción a las drogas.
“El próximo 3 de febrero voy a cumplir 19 años de haber dejado el flagelo de las drogas y estoy agradecido a Dios porque pude reiniciar mi vida”, expresó Zapata, quien se convirtió en el décimo cuarto campeón mundial panameño.
Zapata, tres veces campeón mundial en dos categorías distintas, manifestó su deseo de aportar más al boxeo impartiendo sus conocimientos de boxeo, así como también dictando charlas a la juventud con relación a lo perjudicial que es el mundo de las drogas.
En su primera oportunidad titular destronó a Shigeo Nakajima por puntos en Tokyo el 24 de marzo de 1980, conquistando la corona minimosca del CMB. Hizo ocho defensas exitosas. El 20 de julio de 1982 reconquista la corona, superando por puntos a Tadashi Tomori, pero sucumbe en la primera defensa ante Jung Koo Chang en Corea. El 5 de octubre de 1985 se convierte en campeón mosca de la AMB al superar en la ciudad de Panamá a Alonzo González. Realizó cinco defensas consecutivas hasta perder en polémico combate ante Fidel Bassa.
