Por necesidad

Por necesidad

Siempre he sido perseguida por los “manes” debido a que tengo un cuerpo muy “sexy” y lleno de curvas. Aunque no me dejo engañar por que los “manes” con tal de comerse la cosita son capaces de mentir y engañar. En el hombre la necesidad de sexo es más física y mecánica, mientras que en nosotras es algo más sentimental. Una hembra tiene que gustarle un “man” para abrirse mientras que ellos se la guardan a quien sea, después que tenga raja. No les importa si es fea, bonita, flaca o gorda. Solo huelen la carne y se les para el arpón, es automático. Por eso se pueden masturbar viendo una revista o imagen porno.

A la mejor cazadora se le escapa la liebre

El sujeto entró a mi vida ofreciéndome el cielo y las estrellas, y está tan buenón que le creí todos sus cuentos y promesas. No le di vueltas y una semana de conocernos ya era su mujer. Y la verdad que me encantó porque la mueve cuando se le pone dura, también la tiene grande. No hay mujer a la que no le guste grande y dura, y bien cuereada hasta la cacha del puñal. El sujeto me sacaba toda la leche y me dejaba cansada hasta el agotamiento.

El itinerario

Les explico para que me entiendan. No escatimaba tiempo y entusiasmo para precalentar mi hornito. Me repasaba toda con su lengua experta, se notaba que tenía mucha experiencia previa en esos menesteres. Cuando ya me tenía que se me chorreaba, entonces procedía a dar la estocada. Era delicioso porque comenzaba con la brochita, luego jugaba en la entradita a que sí a que no, y luego la empujaba suavecito, centímetro a centímetro. Y comenzaba a bombear muy lento hasta llegar a aumentar la velocidad y la potencia de su empuje.

Decepción

En la cama todo era felicidad, el problema ocurrió afuera porque comenzó a pedirme dinero prestado y se perdían cosas en mi casa. Mis amigos hicieron una pequeña pesquisa y descubrieron que mi enamorado era un pillo. Al principio no lo creía, pero los hechos me abrieron los ojos. Cuando lo confronté ni siquiera hizo el intento, simplemente salió de mi casa para nunca más volver. Por eso, chicas, tengan cuidado de coger con extraños y si se lo tiran, nunca lo lleven a casa, solo deséchenlo.