mundo

Los sepultureros de Portugal no piensan en desconfinar

Trajes blancos de protección, gafas de plástico y uso constante de gel antes de enfundarse los guantes son solo algunos de los pasos para estos profesionales, eslabón final de una pandemia que se ha cobrado más de 16.000 vidas en Portugal, casi 6.000 de ellas perdidas solo en enero.

Lisboa / EFE

"¿Qué les parece el debate sobre cuándo desconfinar Portugal?". La respuesta del equipo de sepultureros del Alto de São João, el mayor cementerio del país y donde las duras escenas del pico de coronavirus de enero han dejado secuelas psicológicas en expertos en lidiar con la muerte, no deja lugar a dudas.
 
LE TAMBIÉN: El papa elige el "nosotros" universal para la Jornada Mundial del Migrante
 
"Ha sido duro, muy duro. Y aún es complicado", cuenta someramente a Efe uno de los principales funcionarios del camposanto, Fausto Caridade. Es el único comentario que hará durante una mañana en la que volverán a asistir entierros de fallecidos por coronavirus. Una rutina nueva que les han obligado a adoptar medidas extraordinarias.

Trajes blancos de protección, gafas de plástico y uso constante de gel antes de enfundarse los guantes son solo algunos de los pasos para estos profesionales, eslabón final de una pandemia que se ha cobrado más de 16.000 vidas en Portugal, casi 6.000 de ellas perdidas solo en enero.

Ese mes fue un tsunami para el país que impactó de lleno, entre otros, en los sepultureros, que han sufrido de la misma forma en que trabajan: en silencio y en segundo plano, lo que, temen, hace que se olvide que son también trabajadores de primera línea enfrentando cara a cara las consecuencias de la covid.

Pero nadie habla de ellos para recibir de forma prioritaria vacunas. En el Alto de São João se vive una realidad paralela a la del resto del país. No se habla aquí de mejora de indicadores o eventuales reaperturas. Aquí, todavía se trata de superar el caos de enero enfundados en trajes de protección y temiendo nuevas olas.

TUMBAS OCUPADAS EN TIEMPO RÉCORD
En el Alto de São João abrieron el pasado 29 de diciembre una sección con capacidad para 400 féretros. Antes de la covid, un espacio así habría tardado más de cinco meses en ocuparse, pero ya se trabaja en la última línea, y estiman que esta zona estará completa en menos de una semana.

"El 95 % de los que están aquí son fallecidos covid", cuenta a Efe uno de los sepultureros, que al igual que sus compañeros, declinan identificarse. El camposanto se negó desde el principio a abrir espacios especiales para las víctimas del virus, ya que lo considerarían "discriminatorio", pero los números confirman que son la mayoría.

Sobre todo después del duro enero que vivió Portugal, en el que se dispararon las muertes por coronavirus. Se llegó a superar los 300 decesos en un día, algo inaudito para un país con diez millones de habitantes.

A esto se sumaron las muertes por otras causas, que hicieron que durante casi una semana se contaran más de 700 fallecidos diarios.

Las funerarias y los propios cementerios se desbordaron y pasaron a tardar entre 3 y 7 días en poder dar sepultura o hacer incineraciones. En el São João, donde los crematorios suelen trabajar hasta las cinco de la tarde, llegaron a funcionar en enero hasta las nueve de la noche.

Algo de que aquel ritmo ha quedado en el camposanto, donde una excavadora abre cada día alrededor de 10 huecos en la tierra, porque persiste la incertidumbre de si atenderán muchos funerales. En los peores momentos llegaron a tener 15 entierros covid en un día, y aunque el ritmo ha bajado, aún no fían.

El ambiente es pesimista. Acostumbrados a trabajar en momentos cargados de emotividad y dolor para quienes se despiden de un familiar, las escenas vividas en enero han dejado un impacto psicológico en los sepultureros.

Afectados, no quieren ni participar en el debate que ruge en la sociedad portuguesa tras un mes y medio de confinamiento, el de cuándo reabrir para tener alguna ansiada normalidad. En este cementerio solo ven un posible final a la precipitación.

NÚMEROS EN LUGAR DE LÁPIDAS
Y lo hacen en parte porque aún es visible la saturación del São João en la propia sección a punto de completarse. Aquí la norma es que haya tumbas coronadas por flores frescas pero sin lápidas, solo con pequeños carteles blancos con números.

Es así porque todavía no se ha podido gestionar la idenficación de los difuntos, un proceso que no solía demorar más de dos semanas pero que, con las familias confinadas y las funerarias y otros profesionales al límite, lleva atrasos considerables.

La última tumba que cubren los cuatro sepultureros lleva por toda indicación el número 1916. Está en la última fila, a seis espacios de donde la excavadora ha parado para respetar el silencio de la familia que despide el féretro. Arriba a la izquierda, al inicio de la sección, arranca otra placa numérica que espera desde hace dos meses un nombre.

PROFESIONALES EXHAUSTOS
El Alto de São João ha enfrentado la situación padeciendo al mismo tiempo bajas por covid. A finales de año uno de los sepultureros dio positivo y otros tres tuvieron que aislarse pese a dar negativo.

"Sufrimos como todos, claro, aunque a veces se olviden de nosotros", cuenta uno de ellos. Son los únicos trabajadores del cementerio que llevan un equipo de protección completo. Otros empleados, como el que dispone las coronas de flores ante la tumba que se ocupará esa mañana, mantiene el sobrio traje oscuro, con apenas una mascarilla y guantes.

Que los indicadores hayan mejorado en Portugal no supone cambio alguno para los sepultureros. Su rutina es ya otra, basada en una protección indispensable que comienzan a ajustarse casi 15 minutos antes de que llegue el finado. Así tiene que ser, dicen, porque "¿cómo vamos a parar nosotros?".

Etiquetas
Más Noticias

Nacional CSS suspende temporalmente el envío masivo de ficha digital

Deportes Joselu repite la épica y lleva al Real Madrid a la final

Mundo Cruzeiro, municipio con más muertes por las inundaciones en Brasil

Sucesos Violenta balacera en Arco Iris: Una mujer muerta y varios heridos

Sucesos Capturan a"Dufán", integrante de la pandilla "Villa La Paz" en Chiri

Show Tavo, esposo de Sandra, pierde en la reelección de Cerro Silvestre

Vida Exposición al tabaco al comienzo de la vida acelera envejecimiento

Nacional Se aproxima el Corpus Christi en La Villa y Parita

Deportes Mbappé: "Nos ha faltado la eficacia"

Show Exguerrera, comediantes y trovadores no ganaron en las elecciones

Sucesos Alerta de activista: Denuncia redes de tráfico de menores

Sucesos Tenía 17 años y la muerte violenta se lo llevó

Mundo AstraZeneca retira vacuna para el Covid en todo el mundo

Nacional Malambo reclama agua potable

Show ¡Ayala! Regueseros exigen plata de carnavales antes que Nito se vaya

Sucesos Arrestan a mujer involucrada en estafa por falsos secuestros

Sucesos Dos hombres mueren por atropello en Colón y Chiriquí

Deportes Fedebeis revela preselección nacional U-18

Mundo Japón presenta el primer dispositivo 6G, 20 veces más veloz que 5G

Nacional Mitradel: Empresas privadas deben reportar vacantes disponibles

Sucesos Atrapan a los "Roba puercos"

Nacional Vergueros en varios circuitos

Deportes Donald Lee gana medalla de plata en Sudamericano

Mundo Actriz porno Stormy Daniels sube al estrado en juicio contra Trump

Nacional Candidato PRD gana curul en circuito 2-1 de Coclé; MOCA impugnará

Deportes Tuchel: “El Real Madrid tiene un 51% de posibilidades de ganar”

Mundo Juez analiza encarcelar a Trump por desacato de orden mordaza

Nacional Exigen a funcionarios salientes presentar declaración patrimonial

Mundo Inundación en sur de Brasil deja decenas de muertos y desaparecidos

Nacional Informe de la OEA advierte incertidumbre previa a elección en Panamá