Wilson quedó como ofrenda a espíritus por devolución de niños

Wilson, el perro rescatista de 5 años, aún se mantiene desaparecido en la selva del Guaviare, donde, la semana pasada,  indígenas y la Fuerzas Militares de Colombia lograron rescatar a los cuatro niños perdidos en la selva del Guaviare, tras el accidente de la avioneta en la que se movilizaban el 1 de mayo.

Una de las teorías que ha surgido en torno a la desaparición de Wilson es la posibilidad de que haya sido intercambiado por los niños indígenas rescatados. Esta hipótesis, aunque sin fundamentos sólidos, ha generado especulaciones y debates entre las personas interesadas en el caso.

Jesús Dagua, miembro de la Guardia Indígena del Cauca, afirma que el perro fue dejado en el Guaviare como una ofrenda a los espíritus que protegían a los niños, según publicó el diario El Tiempo de Bogotá.

Dagua aseguró que se están realizando rituales para que Wilson pueda ser encontrado y rescatado. Según él, los pueblos amazónicos están involucrados en esta comunicación espiritual para garantizar la vida del perro rescatista.

Por otro lado, una mujer llamada Mía Vanegas, asegura haber logrado establecer contacto telepático con Wilson y dice que el perro rescatista está vivo y necesita ayuda. Sus afirmaciones han generado tanto escepticismo como esperanza entre la población, y muchos se preguntan si la comunicación entre humanos y animales es posible.

Vanegas instó a las personas a conectarse con Wilson y expresarle gratitud por su valiente labor.

Mientras las creencias y teorías se entrelazan en torno a la desaparición de Wilson, el país sigue celebrando el éxito del rescate de los cuatro niños indígenas. La colaboración entre los indígenas y las Fuerzas Militares ha sido clave en esta operación, mostrando la importancia de la unidad y el trabajo conjunto para enfrentar situaciones extremas. A medida que la búsqueda continúa, se espera que Wilson sea encontrado y regrese a salvo, permitiendo que esta historia de esperanza y superación tenga un final completo y satisfactorio.

Lo cierto es que el Ejercito no dejará de buscar a Wilson y para ello están desarrollando una estrategia que incluye el uso de ocho perras adiestradas en celo para atraer al canino.