Frenadeso: Varela criminaliza la protesta social’
Aneldo Arosemena Crítica"Ni bombas lacrimógenas ni masacres" detendrán las manifestaciones populares, afirmó Saúl Méndez, dirigente del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs).
Las declaraciones de Méndez fueron luego de un pronunciamiento del Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (Frenadeso), que rechazó las medidas adoptadas por el gobierno de Juan Carlos Varela contra las protestas ciudadanas y los cierres de calles.
Para Frenadeso, con la medida adoptada por el actual gobierno lo que buscan es "criminalizar la protesta social".
Según la organización, el Gobierno, con 14 meses, experimenta un desgaste político y "para desviar la atención de la opinión pública, en contubernio con los propietarios de algunos medios de comunicación, han hecho manos de una campaña de justicia selectiva que poco a poco se convirtió en un lamentable circo que ya repugna al pueblo", según dijeron.
Igualmente, denunciaron que en el ámbito económico y social "persisten los proyectos de privatización del Idaan, la CSS, educación y salud", y agregaron que "el costo de vida sube, agravado por las condiciones climáticas, como lo demuestran las largas colas que se hacen desde tempranas horas de la madrugada por parte de humildes ciudadanos en busca de alimentos".
El pronunciamiento fue en ocasión de conmemorarse, el domingo 16 de agosto, un aniversario más del fallecimiento del dirigente del Suntracs Luiyi Argüelles, ocurrido en Isla Viveros, durante el gobierno de Martín Torrijos.
Según Méndez, la administración del presidente Juan Carlos Varela no da respuestas y, al igual "que antecesores, amenazan al pueblo".
"El pueblo tiene que seguir en la calle para defender los recursos. Las amenazas vertidas no son la solución a los problemas", señaló el dirigente sindical.
La reacción de la organización, que aglutina a sectores sindicales, docentes, estudiantiles y campesinos, surge por la declaración del ministro de Seguridad, Rodolfo Aguilera, en el sentido de que las fuerzas gubernamentales pondrán en práctica un protocolo para impedir el cierre de calles por manifestantes.