Inmoral aumento de 1,000% en la ATTT
La Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), encabezada por Julio González Pereira, acaba de meterle un sablazo monumental a los dueños de vehículos, al aplicar aumentos hasta de mil por ciento en concepto de registro único vehicular. Súbito, sin consulta previa y sin vaselina.
Mediante la resolución JD-03 del 3 de enero de 2017, la entidad impone tasas de inscripción de registro único vehicular de $100 a los autos con un valor menor a los $15 mil.
De $15 mil 1 a $50 mil, la tasa será de 1% del valor total del vehículo, y si es un auto de $50 mil 1 a $85 mil, la tasa sube a un 1.25%. Cualquier auto más caro que eso pagará tasa de 1.5%.
Son aumentos masivos con respecto a los que antes se pagaba. Anteriormente, los autos de hasta $15 mil pagaban $10. Cualquier auto más caro pagaba una tasa de 0.1% de su valor.
Todas estas tasas aplican para autos nuevos y para los de segunda importados.
La medida tomada por González le ha merecido una apambinchada en redes sociales, a tal punto que ya se señala que González Pereira podría correr la misma suerte de Estivenson Girón, el hombre que fue llevado de la mano del varelismo a la dirección de la Caja de Seguro Social y la puso al borde del colapso, teniendo que renunciar hace dos semanas.
"Lo más inmoral que he visto es lo que acaba de hacer la ATTT, de subir el registro único vehicular hasta 1,000% (mil). La entidad del Estado + incapaz", tuiteó el periodista y comentarista Juan Carlos Tapia.
El abogado González Pereira ha sido cuestionado desde su propia ratificación como director de la ATTT en julio de 2014, principalmente por su falta de experiencia en el sector transporte antes de asumir el cargo.
Bajo su gestión, se han recrudecido los tranques vehiculares en la ciudad capital. Los “diablos rojos”, que habían sido casi eliminados con la entrada en operación del metrobús, han vuelto en las calles capitalinas, y el tema del transporte pirata se ha vuelto endémico, a tal punto que el propio González admitió que el tema "se había salido de control".
En septiembre de 2015, dijo públicamente que los conductores de la plataforma Uber estaban infringiendo la ley y que necesitaban un permiso de operación y una licencia tipo comercial; pero semanas después, el presidente Juan Carlos Varela lo desautorizó y defendió a Uber, señalando que no compite con los taxistas.