Atención, señor director

Han transcurrido tres administraciones en la Caja de Seguro Social, y uno de los sueños de los pensionados y jubilados ha sido ese proyecto llamado Centro Recreacional del Adulto Mayor de la Seguridad Social (CCRRMSS), creado para promover el compañerismo entre la población de adultos mayores y evitar el sedentarismo, renovar las condiciones físicas a través de dinámicas, cursos y lo principal con su plan de atención primaria.

En otros países, a los jubilados y pensionados se les premia por toda una vida de trabajo productivo, con comodidad en su edad dorada, las cuales ellos han pagado de antemano con el trabajo de toda su vida.

De este proyecto, el entonces director de la Caja de Seguro Social Guillermo Sáez Llorens, mediante acto público, entregó la orden de proceder, acompañado con la colocación de la primera piedra, dicho centro estará en Las Cumbres, a un costado de la Ulaps Edilberto Culiolis.

Este centro contará con anfiteatro, centro de meditación, área para talleres, un consultorio médico, ambulancia, piscina para tratamientos fisioterapéuticos, gimnasio, salón de belleza, área de pista y campo, centro de juegos, un sendero ecológico para realizar caminatas y terapias, allí también tendrán espacios para desarrollo personal, como tocar instrumentos musicales, artes culinarias, artes plásticas, baile, juego de barajas, dominós, y un centro donde puedan adquirir conocimientos computacionales y tecnológicos.

Además de eso, el mismo contaría con la compañía de personal médico y enfermería, para brindarles en caso necesario atención primaria, incluso contará con autobuses para el traslado hasta el centro para ida y regreso.

Un signo que denota mucho sobre el grado de desarrollo de una sociedad es el cómo se trata a sus adultos mayores.

Finalmente, señor director, usted que ya tiene orden de proceder, entonces, aproveche ese dinamismo que le sale por los poros y proceda con la construcción del Centro Recreacional del Adulto Mayor, que hará felices a miles de jubilados y pensionados que ahora nos vemos obligados hacerlo en parques y refresquerías, estas últimas por la humanización de sus propietarios. Gracias de antemano.